L a inflación española registró una tasa interanual del 2,5% en marzo, mes en el que los precios subieron el 0,8%, y la tasa interanual subyacente - que excluye la energía y los alimentos frescos - descendió tres décimas y se situó también en el 2,5%. En la Comunidad Valenciana subió un 0,7%, con lo que la tasa interanual se situó en la tasa interanual se situó en el 2,4%. En Alicante, los precios subieron un 0,6% y un 0,8% en Castellón y Valencia.

En términos interanuales la provincia con más inflación es Castellón (3,0%);, seguida de Alicante (2,4%); y Valencia (2,2%);.

Estos datos fueron publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE);, que también informó de que el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA); se situó en marzo en el 2,5%, con lo que el diferencial de inflación con la zona euro se redujo hasta 0,6 puntos porcentuales.

Los grupos más inflacionistas fueron los de vestido y calzado, que se encarecieron el 3,4% por el inicio de la temporada de primavera verano y el final de las rebajas; el transporte, el 1,5% más caro debido al alza de los carburantes y los alimentos y bebidas no alcohólicas, que subieron el 0,4% debido al encarecimiento de pescados, crustáceos y carne de ave.

En los últimos doce meses, los precios que más subieron fueron los de las bebidas alcohólicas y el tabaco, el 6,5%, la hostelería, el 4,7%, y la enseñanza, el 4,6%.

Desde el Gobierno, el vicepresidente segundo, Pedro Solbes, reconoció que la tasa de inflación es «peor de la que esperábamos», aunque matizó que sigue siendo una «muy buena cifra». Por su parte, el secretario de Estado de Economía, David Vegara, afirmó «no es descartable» que la inflación baje del 2% en el primer semestre del año, si bien admitió que debido al incremento de los precios del crudo, «sí es más difícil ahora que hace dos meses».

El secretario ejecutivo de Economía y Empleo del PP Miguel Arias, manifestó que el dato del IPC de marzo no incorpora el aumento del precio del petróleo en las últimas semanas y advirtió al Gobierno de que «no se duerma en los laureles», ya que el repunte del crudo podría producir una «desagradable sorpresa» en los próximos meses.

Por parte sindical, CCOO calificó de «buena noticia» el descenso de la inflación subyacente en tres décimas, pero indicó que es un resultado «insuficiente», especialmente cuando el precio de los productos energéticos muestra una «clara» tendencia al alza.

UGT consideró que para corregir la inflación debe cambiarse el modelo de crecimiento económico, que se basa «mucho» en el consumo interno y en la preponderancia del sector servicios, «el más inflacionista», que representa casi el 60% de la renta nacional. Por su parte, las Cámaras de Comercio prevén que en los próximos meses se moderará la inflación, aunque alertaron de que existen «numerosos riesgos» que pueden frenar esta contención, como la subida de los precios del crudo.