El juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu ha decidido citar a declarar al representante legal de la auditora Deloitte y a su socio Francisco Celma como investigados -antes imputados- en el caso que investiga las supuestas irregularidades cometidas en la salida a Bolsa de Bankia, para la que supuestamente se utilizaron unas cuentas que estaban falseadas. La auditora se apresuró a negar cualquier irregularidad: «Insistimos en que nuestro trabajo está correctamente hecho, y así lo vamos a demostrar», aseguraron fuentes de la compañía.

La providencia acuerda que ambos comparezcan el próximo 20 de junio a las 9:00 horas después de que el magistrado haya admitido a trámite el escrito presentado el pasado abril por el movimiento popular «15MpaRato» y la Confederación Intersindical de Cajas (CIC) en el que solicitaban la imputación de Deloitte y Celma. Se trata de la segunda vez que el movimiento solicita la investigación de la firma auditora después de que en abril de 2015 ya se dirigiera al juzgado en los mismos términos al considerar a Deloitte y Celma «cómplices en la estafa de Bankia». La acusación popular argumentó ya entonces que «ni el informe de Deloitte podía avalar la salida a bolsa de Bankia ni su auditoría a las cuentas del 2011 es fiable», después de que la firma hubiese sido sancionada por el Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas (ICAC), dependiente del Ministerio de Economía, por una «infracción continuada muy grave» del deber de independencia. Una supuesta falta de diligencia detectada por los peritos judiciales cedidos por el Banco de España, Antonio Busquets y Víctor Noguera, durante la elaboración del informe final en el que ratificaron que el debut bursátil de Bankia fue «fraudulento».