El secretario de Estado de Presupuestos y Gastos, Alberto Nadal, cifró ayer en unos 1.000 millones de euros el coste de la nueva Ley de Medidas Urgentes al Trabajo Autónomo, de los que entre 500 y 600 millones se corresponderán a la ampliación de la tarifa plana, y afirmó que la «única restricción» para acometer rebajas impositivas es que sean compatibles con el objetivo de consolidación fiscal. La mayor parte de las medidas incluidas en la nueva Ley de Autónomos entrarán en vigor después del verano, mientras que el resto se pospondrán hasta el 1 de enero de 2018, y entre sus medidas se incluye la que que dobla el periodo de vigencia de la tarifa plana de 50 euros, pasando de seis meses a un año, de la que más de 350.000 autónomos ya existentes se beneficiarán. Nadal reconoció que empieza a haber «márgenes» para acometer este tipo de medidas.