La recuperación del calzado, así como el músculo que sigue mostrando el sector agroalimentario, con las hortalizas a la cabeza, han permitido a las exportaciones alicantinas recuperar el terreno perdido y situarse incluso por encima de los niveles anteriores a la pandemia. Las ventas al exterior en el primer semestre han crecido un 6,5% en relación al mismo periodo de 2019, alcanzando los 2.980 millones de euros. Reino Unido, Portugal, Italia, Francia y Estados Unidos son los destinos que han liderado el incremento de la demanda. La incertidumbre reside ahora en comprobar si esta línea ascendente se mantiene en la segunda mitad del año o si por contra se ve truncada por el incremento de los costes del transporte marítimo y la falta de contenedores.
El Instituto de Comercio Exterior (ICEX) hizo públicos ayer los datos de exportación correspondientes al primer semestre. En lo que respecta a la provincia de Alicante, con 2.980 millones de euros, el aumento en relación al mismo periodo del ejercicio anterior, marcado parcialmente por la pandemia, ha sido del 19%. Con todo, el dato más significativo se extrae de la comparación con 2019, cuando aun no había irrumpido el coronavirus, dado que también se registra un crecimiento, en este caso del 6,5%. La cifra adquiere mayor importancia si se tiene en cuenta que 2019 marcó los máximos históricos en materia de exportaciones para la provincia.
Uno de los sectores que ha tirado con mayor fuerza en esta remontada ha sido el calzado, curiosamente la industria que se ha visto más afectada por la pandemia, pero que sin embargo se sitúa en estos momentos en una clara línea de recuperación. El incremento de las ventas al exterior en estos seis primeros meses ha sido del 19,5%, con 563 millones de euros que le permiten seguir liderando el ranking provincial de exportaciones. También sigue mostrando músculo el sector agroalimentario, con un fuerte aumento del 24% en las hortalizas y legumbres, que sitúan la cifra en 261 millones. Se mantienen igualmente arriba, aunque en este caso con una ligera caída del 0,9%, las frutas, que vendieron al exterior 301 millones.
El resto de los sectores han registrado incrementos, destacando el 10,5% de los plásticos, que sitúan las exportaciones en 190 millones, o el 27% del sector del automóvil, con una cifra de 104 millones. También el juguete crece, un 37,7%, para alcanzar los 65 millones. Con todo, el incremento porcentual más significativo es el de los aparatos y materiales eléctricos, nada menos un 162,8%, hasta totalizar 82 millones de euros.
Las importaciones, pese a aumentar, aún están un 5,9% por debajo que las que se registraban antes de la crisis
Este buen comportamiento de las ventas al exterior está fundamentado en la activación de la demanda en Europa. Destaca el crecimiento del 76,2% en los envíos al Reino Unido, curiosamente después de la entrada en vigor del Brexit, con 176 millones. También es reseñable el aumento del 28,6% en Portugal (199 millones), del 27,1% en Italia (319 millones), y del 23,3% en Francia (465 millones). En Alemania la subida ha sido más discreta, de un 3,3%, aunque se mantiene en el segundo puesto del ranking exportador con 351 millones.
Comentario aparte merece el comportamiento del mercado estadounidense, que ha crecido en estos seis meses un 26,3%, hasta alcanzar los 176 millones de euros. En ello puede ha tenido bastante que ver la supresión de aranceles en algunos productos como el aceite de oliva, el vino o los quesos, así como la suspensión temporal de los que se anunciaban para el calzado.
Las importaciones, por otro lado, han experimentado un incremento, del 14,7%, en relación al primer semestre del año pasado, al situarse en 2.200 millones de euros. En este caso, sin embargo, todavía no se han alcanzado los niveles prepandemia, toda vez que son un 5,9% inferiores a las registradas en 2019.
La falta de contenedores es una amenaza para la buena evolución de las ventas en lo que resta de año
La evolución de las exportaciones de la provincia, por tanto, ha sido muy positiva en la primera mitad del año, último dato disponible, aunque aun falta por ver lo que sucederá en los últimos seis meses, atendiendo a una serie de factores que se están convirtiendo en un lastre para la recuperación. Este es el caso de los costes energéticos y de las materias primas, disparados en las últimas semanas, y también del encarecimiento del transporte marítimo y la falta de contenedores, que está causando desabastecimientos.
