Las subidas de tipos de interés aprobadas por el BCE no serán suficientes para atajar la inflación que se está comiendo el poder adquisitivo de las familias, si no se toman medidas adicionales. Así lo ha advertido este miércoles el decano del Colegio de Economistas de Alicante, Francisco Menargues, que ha abogado por alcanzar un pacto de rentas que evite la denominada inflación de segunda ronda y por una bajada del IVA en los productos básicos.

Eso sí, Menargues no ha querido mostrarse pesimista y ha señalado que, a pesar de todas las previsiones apuntan a que los dos próximos trimestres arrojarán un resultado negativo, "todavía es pronto para hablar de recesión ya que se espera que la próxima primavera se produzca un repunte de la economía en España".

El presidente de los economistas alicantinos ha denunciado que "el único beneficiario de la inflación es el Estado, ya que por cada punto positivo éste ingresa 2.000 millones en sus arcas. Es una ecuación sencilla. El incremento de los precios lleva implícito un aumento de impuestos".

Por su parte, el tesorero del colegio, Carmelo Rives, ha negado que la tormenta perfecta que ha llevado la tasa de inflación a niveles récord pueda achacarse únicamente al conflicto bélico que tiene lugar en Ucrania, "ya que en el mes de febrero ya teníamos una tasa del 7%, cuando aún no había estallado la guerra".

Sin embargo, Rives, ha apuntado a otros factores, señalando que todo comenzó con la crisis sanitaria del covid-19 ya que, cuando se levantaron las restricciones, aumentó de forma muy rápida el consumo y las empresa se encontraron con que no estaban preparadas para asumir tal demanda. "Por tanto esta es una crisis que comenzó siendo de demanda y ha terminado siéndolo también de oferta, una situación que no es inédita pero sí relativamente nueva", ha señalado el experto.

Otro de los motivos que apunta el decano del Colegio de Economistas es el incremento de los derechos de emisión del CO2, "que pasaron de 25 euros en 2020 a 90 euros en 2022, lo que ha provocado el aumento del precio de la energía y esto también ocurrió antes de la guerra de Ucrania". Según Menargues el aumento del salario mínimo interprofesional tampoco ha ayudado.

Sin embargo esta crisis la afrontamos, según los economistas, más preparados que la anterior, con un sistema bancario mucho más saneado al igual que el endeudamiento de las familias y de las empresas que también ha descendido. Respecto a los presupuestos Generales del Estado, Jose Antonio Villalobos, economista contador de la junta directiva del Colegio, ha señalado que estos "contienen medidas electoralistas como la revalorización de las pensiones al IPC, una medida lineal, que se aplicará por igual a todas las pensiones y que no beneficiará preciosamente a la lucha contra la inflación".

España gasta en la actualidad 170.000 millones de euros en pagar las pensiones, mientras que la Seguridad Social arrastra un déficit de 27.000 millones.

Se da la circunstancia de que algunos pensionistas perciben una prestación cuyo importe es superior al salario de algunas personas jóvenes en activo, según apunta desde el Colegio. Todo esto, según los economistas, deberá abordarse más pronto que tarde ya que el actual sistema no es sostenible, lo cual hace necesario una reforma seria y profunda que habilite nuevas fórmulas, porque el actual modelo tiene fecha de caducidad.