La actualidad del equipo, horas antes del enfrentamiento de viernes ante el Sevilla (21 horas) tiene noticias positivas y otras negativas. Empezando por las menos buenas, dos ausencias hoy en el entrenamiento en el Díez Iborra, las de Diego González y Raúl Guti. Con solo una sesión por delante, parece complicado que puedan estar en la capital hispalense y son seria duda para Francisco, que hoy confirmará este extremo en la rueda de Prensa que se celebra a mediodía.
La baja del defensa Diego González es una de las preocupaciones del entrenador franjiverde, que esta mañana recuperó en la dinámica del grupo a Pedro Bigas, pero que tiene también recién reincorporado a Enzo Roco. Las lesiones se están cebando con la zaga del Elche y el último en caer ha sido Diego González que, según la cadena Cope, sufrió un pinchazo en la zona del isquiotibial de su pierna derecha y se retiró del entrenamiento del martes antes que el resto. Esta mañana se confirmó su lesión al no acudir con el grupo a una de las sesiones más importantes de la semana.
Por otra parte, el centrocampista Raúl Guti tampoco estuvo presente en la última jornada de entreno. Tiene molestias en un cuádriceps y su presencia en Sevilla está en el aire.
El que sí se ejercitó con el grupo fue Iván Marcone, pese a que Bragarnik estaba en Argentina negociando su venta a Independiente de Avellaneda. A última hora, la Prensa sudamericana daba por frustrado su fichaje. Según aseguraba TyC Sports, «a esta altura, la llegada de Iván Marcone al Rojo, el club de sus amores, está caída». Todavía es posible un acuerdo, pero este medio afirmaba también que Independiente ha hecho una oferta que no agrada a Bragarnik, «una salida a préstamo» del jugador.
Una noticia positiva del día fue la vuelta a la disciplina del equipo el delantero Lucas Boyé, al que los servicios médicos del club están dando más descanso para que siga recuperándose de sus molestias en un tobillo. También regresó, como se ha citado anteriormente, Pedro Bigas, aquejado días atrás por un golpe en su costado en el último partido.
A su vez, hubo susto. Con Pere Milla. El atacante ilicitano, autor de dos goles en el último encuentro, se retiraba momentáneamente de la sesión de trabajo en el campo de fútbol Díez Iborra, pero regresaba al césped poco después, en menos de un minuto. Se dolía de su pie derecho, pero al final todo quedó en la molestia tras haber recibido un pisotón.
El equipo entrenará de nuevo mañana a partir de las seis de la tarde en una sesión que se llevará a cabo en el estadio Martínez Valero y a puerta cerrada, como todas las que organiza en los últimos meses el club, que no ha informado todavía sobre el viaje de la expedición franjiverde, que podría ser el mismo día del partido teniendo en cuenta que se juega a las nueve de la noche.
