El estudio de viabilidad del nuevo Mercado Central plantea que la concesión de suelo municipal se compense con la urbanización de las calles anexas, el ajardinamiento y la urbanización de la plaza de las Flores, la construcción del mercado provisional y el resto de actuaciones necesarias en el entorno, de forma que no sería necesario el pago de un canon. Así se recoge en el plan, presentado por el Grupo El Árbol -cuyo consejero delegado es el ilicitano Juan Pascual- y que salió ayer a información pública, como actuación preparatoria del contrato de concesión de obra pública para la construcción y posterior explotación del nuevo Mercado Central, que, no obstante, se podrá adjudicar a ésta o a otra empresa.
La altura de la edificación será de dos plantas y tres sótanos. Bajo rasante se situarán dos plantas de parking con capacidad para 399 plazas, de las que 133 se sacarán a la venta, y el aparcamiento se complementará, según el plan, con la peatonalización de las calles situadas junto al Mercado Central.
Además, en el sótano uno se emplazará un supermercado con 1.500 metros cuadrados de superficie y un almacén de 300 m2; un local comercial de 670 m2 y una plaza pública abierta, con rampas peatonales de acceso.
Mientras, en la planta baja estarán los 46 puestos para el mercado de abastos. En este sentido, el documento plantea abran en horario de mañana y tarde, "acorde con los horarios intrínsecos del comercio".
Por otro lado, en el primer piso habrá una zona deportiva, con dos pistas de pádel, una gran sala de musculación, salas de aeróbic, y zona de duchas y taquillas, junto a una cafetería. Finalmente, en la cubierta habrá un local de restauración de 300 m2 con una terraza ajardinada de 450 m2, según el proyecto.
El estudio también detalla que el futuro adjudicatario de la explotación del edificio deberá contar con un equipo técnico para el mantenimiento de las instalaciones y el equipamiento, con el fin de garantizar su correcto funcionamiento y "obtener la mayor vida útil del edificio y sus instalaciones".
Asimismo, el documento destaca "la importancia que puede tener para este proyecto que desde un punto de vista municipal se coordine la actividad y nuevas licencias de todo el entorno comercial que cierra el perímetro de este proyecto, con el fin de potenciar la actividad comercial con operadores complementarios y no perder el atractivo social de la nueva zona".
En cuanto a la concesión, se especifica que será para 40 años en el caso de toda la construcción sobre rasante y una planta de aparcamiento, para garantizar las plazas en rotación. Finalmente, el plan fija en 24 meses, desde la firma del contrato, el plazo para la apertura al público.
LAS CLAVES
EL INMUEBLE
Diseño vanguardista y que no oculte las vistas de Calendura
El plan apuesta por un aspecto del edificio «muy vanguardista», y que, además, según se precisa, «sea un referente atractivo que incite a su disfrute y su visita». En esta línea, se asegura que «se pretende crear un icono nuevo en el centro de la ciudad». Por otro lado, el inmueble deberá retranquearse como mínimo diez metros de las alineaciones de las calles situadas al norte y al sur y respetar las vistas de Calendura desde la plaza de las Flores y el Carrer Major de la Vila.
MERCADO DE ABASTOS
Diferentes tipos de puestos y espacio para la venta de tapas
El estudio de viabilidad recoge diferentes tipos de puestos en lo que al diseño se refiere, de forma que los más amplios serán de 4,50 metros de ancho y de tres metros de fondo, dotados de las instalaciones necesarias de frío y mantenimiento. Además, se toma como referencia el Mercado de San Miguel de Madrid y se aboga por la incorporación de puestos con servicio de venta y consumo de tapas.
ÁREA DE INFLUENCIA
Cerca de 700.000 habitantes de Elche y poblaciones cercanas
El proyecto especifica que el área de influencia directa tendría una población de 59.748 personas, aunque, de forma indirecta, también llegaría al resto de barrios y pedanías ilicitanos, y a poblaciones cercanas como Alicante, Santa Pola, Guardamar, Crevillent, San Fulgencio, Dolores, Aspe o Monforte del Cid, hasta llegar a los 690.410 habitantes.
586.000 euros
Son las rentas anuales que se prevén obtener por la ocupación de los locales que se ofrecerán en régimen de alquiler.
9,2 millones de euros
Es el coste de la inversión previsto por la empresa.
