El Ayuntamiento de Elche quiere evitar acudir a la vía legal para desalojar el Mercado Central, donde resisten varios placeros, que se negaron a recoger la notificación en la que se les informaba de que la junta de gobierno local había decretado el desalojo del edificio para dar continuidad al proyecto de reconstrucción adjudicado a la empresa Aparcisa, que debe realizar un tercer proyecto de catas arqueológicas. Para ello, el alcalde, Carlos González, y el concejal de Mercados, Carlos Sánchez, mantuvieron ayer una reunión con los afectados, a los que pidieron que pusiesen algo de su parte para acabar con este conflicto sin tener que hacer un uso estricto de la ley.

El primer edil les pidió una fecha para dejar las instalaciones en las que siguen trabajando en la primera planta del Mercado Central, ofreciéndoles un plazo de tiempo «razonable», para acometer el desalojo y, si lo desean, el traslado de su actividad económica a otro emplazamiento.

«No queremos acudir a la vía estrictamente legal», aseguró Carlos González ayer, al término de la reunión. Y es que el siguiente paso que iba a dar el Ayuntamiento era comunicar el desalojo a los afectados a través del Boletín Oficial de Estado, de forma que aunque no recogiesen la notificación, se les diese por comunicados legalmente.

En el encuentro de ayer los placeros no pusieron fecha, pero se comprometieron a dar una respuesta en breve, ya que la intención municipal es que el complejo de abastos esté desalojado para el 15 de septiembre, para que Aparcisa pueda seguir ejecutando el proyecto del nuevo Mercado. El siguiente paso a dar es el de las terceras catas arqueológicas, antes de determinar si el proyecto puede continuar, tal y como está planteado en el contrato que adjudicó el Partido Popular durante el anterior mandato municipal.

En el encuentro el alcalde expuso en que oponerse al proyecto puede acarrear la obligación de pagar una indemnización millonaria a la empresa concesionaria del nuevo Mercado Central, por lo que insistió en la necesidad de poner el edificio a su completa disposición, como figura en el contrato.

En el Mercado Central quedan actualmente nueve placeros, y sólo uno se ha mostrado interesado, hasta la fecha, por trasladarse a otro complejo de abastos.