Residentes en los alrededores de la Finca El Arsenal, donde se proyecta más de un millar de viviendas, aseguran en un comunicado que han observado la salida de los residentes de la casa señorial el 3 de noviembre, «quedando deshabitada y vacía de todas sus pertenencias. Los habitantes ya no tienen acceso, solo pueden encargarse del cuidado de la vegetación y los gatos que tienen». Se trata de una zona considerada como un yacimiento arqueológico vinculado a La Alcudia.

Los vecinos señalan que «los días 4 y 5 de noviembre, bajo la supervisión de un técnico, acudió un equipo de herreros que, con planchas de chapa de hierro, cubrieron todos los huecos de puertas y ventanas accesibles desde la planta baja; suponemos, con la intención de impedir que sea ocupada».

El Ayuntamiento tiene que resolver qué alternativa tiene que dar a los promotores de la zona después de que el Ministerio de Cultural paralizara el proyecto urbanístico por su posible afección al yacimiento.