El nuevo carril bici proyectado para Altabix discurrirá por el centro de la avenida de Alicante y conectará con Juan Carlos I por la plaza de Benidorm hasta la rotonda junto a la Ciudad Deportiva Juan Carlos Romero. Desde la Concejalía de Movilidad Sostenible sostienen que se ha elegido este modelo para proteger a los ciclistas. La obra superará los 471.000 euros y se espera que empiece a ejecutarse a finales de 2021 o principios de 2022. El plazo de los trabajos será de cuatro meses.
Esther Díez, edil de Movilidad Sostenible apunta que el objetivo del proyecto es continuar con la apuesta por una movilidad sostenible en la ciudad que tiene en los ciclistas a uno de sus ejes fundamentales “porque garantizan el cambio de modelo hacia un transporte no contaminante que beneficia a los vecinos”. La segunda meta es "pacificar la avenida de Alicante con una reducción efectiva de la velocidad de circulación a 30 Km/h para poder reducir el nivel de contaminación, que ya ha disminuido un 50% con la peatonalización de la Corredora y el carril bici de la Avenida JuanCarlos I”, asegura la concejal.
Desde el área seguraban este lunes que la futura vía está diseñada para brindar total seguridad al ciclista porque a pesar de que la circulación de los ciclistas será por el centro, "se va a segregar del tráfico rodado con una separación física de la carretera". El motivo de que sea en el centro por donde circulen los ciclistas se debe a que “es la más segura porque evita los conflictos con el coche en las intersecciones, con las paradas de bus, la gestión de contenedores y las zonas de carga y descarga”, ha indicado Esther Díez. Tendrá 1.520 metros de largo, entre 2,50 y 3 metros de ancho, y se va a abordar en dos tramos.
Dos tramos
El carril bici tendrá dos tramos. El primero, ubicado en la parte más tradicional de Altabix, pretende rebajar el volumen del tráfico disminuyendo la velocidad de la vía mientras se mantienen las plazas de aparcamiento de la superficie, pues es una zona que no cuenta con plazas subterráneas ni privadas. En este tramo se continúa el carril bici de Avenida Juan Carlos I durante 160 metros por la acera norte de la calle hasta la plaza de Benidorm.
Desde allí ya se producirá la incorporación a la parte central de la Avenida Alicante. En dicha avenida, se suprimirá uno de los 2 carriles de circulación en sentido a Alicante, el que menos presión tiene, de forma que solo quedarán 3 carriles, dos de entrada a Elche y uno de salida a Alicante. De esta manera también se conseguirá cumplir con el objetivo de reducir el volumen de tráfico de la vía.
A lo largo de la avenida habrá incorporaciones de entrada y salida para los ciclistas. Se mantendrán los carriles de giro hacia la izquierda en la zona de la gasolinera de Altabix y la de entrada a la ciudad deportiva, para que los usuarios del barrio puedan entrar y salir con normalidad.
El segundo tramo comenzará a partir de L’Hort de Montenegro y persigue además de rebajar la velocidad de los vehículos, “garantizar el nivel del servicio, pues a partir de este punto se reciben aportaciones de tráfico al desembocar las vías interiores de la ciudad. Por eso le hemos dado un trato diferencial”, apunta la concejala de Movilidad.
Este tramo mantendrá los dos carriles de entrada y salida hacia Alicante. Se va a conseguir eliminando las 15 plazas de aparcamiento de superficie “en una zona que tiene fincas nuevas con aparcamientos propios de forma que no necesitan plazas en la calle como la parte previa”, señala Díez. También se ganarán centímetros de calzada ampliando la carretera a costa de las aceras a la altura de la ciudad deportiva y el polígono de Altabix.
El nuevo carril bici finaliza en el paso de cebra al final de la ciudad deportiva Juan Carlos Romero antes de la rotonda.
Materiales
El carril tendrá un tratamiento superficial compuesto por una doble capa de resinas sintéticas color rojo y pintura acrílica antideslizante en cruces de calzada, también de color rojo.
La protección del ciclista se garantiza a través de líneas de pintura acrílica blanca reflectante, bordillos de canto romo de 10 cm de altura pintados en blanco/negro, pilonas flexibles reflectantes en el inicio y el fin de los bordillos y de balizas cilíndricas reflectantes cada 25 – 30 metros.
Otra de las particularidades de la vía es que contará con zonas avanzadas de espera para el ciclista para darles “visibilidad” y “ventaja”. Los ciclistas se regirán con las mismas fases semafóricas que los vehículos, duplicando las “cabezas de semáforos” con pictograma de bicicletas.
