Cinco edificios sociales más para San Antón con 373 casas. El alcalde, Carlos González, ha acudido al Ministerio de la Vivienda para tratar de acelerar el proceso de regeneración del humilde barrio ilicitano una vez se han construido ya tres bloques y hay un cuarto en camino que se terminará el próximo año, lo que se traduce en 286 hogares nuevos. 

Además de garantizar los fondos necesarios para su construcción, la petición que ha lanzado el regidor socialista esta semana en su viaje a Madrid junto a la edil de Urbanismo, Ana Arabid, al director de Agenda Urbana y Vivienda, David Lucas, va más allá. González busca que estos bloques de viviendas que supondrían una inversión de 30 millones de euros se tramiten de forma simultánea, tras la experiencia que ha supuesto y, sobre todo, el largo tiempo, la primera fase de regeneración urbana en San Antón. El mismo mensaje va a ser trasladado a la Generalitat.

Y es que los vecinos de este enclave de la ciudad, donde hay un millar de viviendas, llevan al menos 20 años esperando para ver hacer realidad un complejo proyecto que permite dejar sus antiguas casas, declaradas en estado de ruina económica, para realojarse en las modernas torres de su mismo barrio a un precio muy por debajo del mercado, gracias a la inversión de las administraciones públicas. 

«Hemos hecho un planteamiento al Ministerio, que en próximas semanas vamos a hacer también a la Generalitat Valenciana, consistente en intensificar el ritmo de ejecución de las obras. Con la demolición de los bloques 11, 12, 13 y 14 durante 2023, prevista en los presupuestos de la empresa municipal Pimesa, vamos a obtener suelo para levantar cuatro bloques, para lo que también disponemos de un quinto solar», explicó el primer edil. 

Con estos espacios disponibles, lo que el equipo de gobierno pretende ahora es acortar los plazos después de que se haya tardado siete años en poder levantar tres edificios y comenzar un cuarto. Y por eso, la aspiración municipal es que de forma simultánea se liciten la redacción de los cinco futuros inmuebles y que también se ejecuten al mismo tiempo. González ve necesario que la obra «reciba un impulso que consideramos muy necesario, máxime en un momento en el que ya está totalmente acreditada la viabilidad económica y social de la misma y su aceptación por parte de los vecinos».

Expectativas

Con esta estrategia, el regidor socialista aspira a obtener una respuesta positiva por parte de la Generalitat Valenciana, la otra administración que junto al Ministerio y al Ayuntamiento sufragan la mayor parte de los costes de la regeneración de San Antón. «Entendemos que es el momento, hemos visto una gran receptividad. Ahora esperamos encontrar en la Generalitat la misma sensibilidad y compromiso que en el Gobierno de España», aseguró.

Esta es una de las actuaciones por la que más ha apostado el equipo de gobierno en los dos últimos mandatos y para el alcalde, «de las más importantes que se está llevando a cabo en todo el país en materia de regeneración urbana». González recalcó que «no hay ningún municipio en España que esté llevando a cabo la regeneración de un barrio con la construcción de nuevas viviendas y el derribo de bloques, y todo con unos costes muy asequibles para los propietarios de las viviendas. Se trata de una actuación ejemplar, tal como ha dicho el propio secretario general de Agenda Urbana, que trae consigo dinamismo económico y generación de empleo».