Terapia perruna en Elche que da la felicidad

Cada vez está más demostrado que las terapias asistidas con animales son beneficiosas. Es lo que considera también Cruz Roja de Elche que ha puesto en marcha una pionera unidad canina que ayudará a que personas con depresión, problemas de psicomotricidad, con parálisis cerebral, alzhéimer, con diversidad funcional o, incluso, niños cuyas madres han sufrido violencia de género, recuperen la sonrisa.

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Cuatro perros adiestrados expresamente para relacionarse con personas mayores o niños y con diferentes problemas son los que componen esta unidad canina de terapia, la primera operativa que tiene la Cruz Roja a nivel nacional.

Junto a los canes, sus dueños, todos ellos voluntarios de Cruz Roja que han pasado un curso y disponen de un diploma como terapeuta para realizar esta encomiable función con personas con distintos problemas.

El amor y el cariño de un perro es capaz de cambiar el estado de ánimo de un niño que está traumatizado porque su madre ha sufrido violencia de género, o también consigue que un autista o un menor con parálisis cerebral mejore su comunicación e, incluso, hasta verbalice mejor.

Curación

Una terapia con perros que ayuda también a mayores que sufren de alzhéimer o a quienes padecen un cáncer. Incluso, acelera el proceso de curación en algunos casos.

Los primeros en haberse visto beneficiados por esta terapia «perruna» tan beneficiosa han sido los usuarios de Integra-T, Asociación sin ánimo de lucro para Personas con Diversidad Funcional Intelectual y sus familias en Elche. Los cuatro canes adiestrados interactuaron con ellos y la sonrisa dibujada en sus rostros emocionó también a sus familiares.

No hay nada como el cariño de un perro que no solo lo tiene hacia su cuidador, también hacia cualquier persona que tiene sensibilidad con estos animales.

"Está demostrado que los perros ayudan a hacer felices a las personas que tienen problemas porque les permiten relajarse y transmitir una sensación de unidad con el animal, además de que son perros que están adiestrados para eso, dóciles y cariñosos, que se dejan acariciar", señala el delegado de Cruz Roja en Elche, Antonio Ramón Guilabert.

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Vínculos

En el curso que han realizado los canes, cuyos dueños son un doctora, profesores de universidad y expertos en medicina deportiva, les enseñan a establecer vínculos con las personas y a hacerlo también a través de los juegos.

Así, en la terapia se puede ver cómo dos usuarios cogen una barra que el perro tiene que saltar o hacen circuitos y recorridos con los animales, para su disfrute. «Es la mejor terapia que pueden tener», señala, orgulloso, Guilabert.

Está previsto que Cruz Roja lleve a cabo un par de terapias al mes con distintos perfiles de usuarios, desde personas con depresión, a quienes tienen una discapacidad intelectual o a personas con alzhéimer. «Se consigue que la persona salga de su aislamiento mental, en esa comunicación con el animal», destaca el responsable de Cruz Roja en Elche.

En el caso de los niños con parálisis cerebral, la experiencia va más allá de la propia terapia. «No veas la cara de felicidad de esos niños cuando interactúan con los perros, son niños a los que les cuesta que la gente les haga caso y al ver que el perro se acerca a ellos, y lo acarician y abrazan, se establece un vínculo especial que les hace felices y les estimula».

Cruz Roja Elche va a ofrecer esta terapia con su unidad canina a cualquier ONG o asociación de Elche que lo demande, de manera totalmente gratuita, por supuesto. Incluso, si un usuario tiene un trauma con algún animal, también esta terapia ayudará a superarlo.

La intención de Cruz Roja, además, es hacer otro curso con perros rescatadores para crear una unidad canina que pueda localizar a personas desaparecidas.