La inesperada derrota del Novelda ante el Ribarroja en el campo de La Magdalena, hace que el equipo entrenado por Frank Castelló siga a 11 puntos de la cuarta posición. Los verdiblancos no pudieron hacer buena la derrota del Catarroja y también perdieron dando una mala imagen ante sus aficionados, ahora que muchos de ellos habían recobrado la fe tras la mejoría experimentada por el equipo en las últimas semanas.

El entrenador noveldense afirmó que "ésta ha sido la peor derrota del año", explicando a continuación que "era el momento en el que más ilusión habíamos creado tanto a la afición como en el propio vestuario. Era el partido que más ganas teníamos de ganar, puesto que nos hubiese dado la opción, la próxima jornada, de ponernos a tiro de piedra del cuarto clasificado en la Liga".

Castelló no encontró explicación a lo sucedido y trató de buscar los motivos que llevaron al Novelda a perder el encuentro. "Fue un partido de despropósitos que no supimos afrontar. Considero que la derrota fue injusta, pero ganar tampoco era justo".

El técnico añade que "no sé si fue ansiedad o qué, pero el equipo trabajó muy bien toda la semana preparando el partido. Esta derrota ha sido un palo", reconociendo que el Novelda no hizo un buen encuentro. "No estuvimos bien, pero sí que llevamos el esférico a las bandas. A balón parado no fuimos capaces de aprovechar ninguna de las ocasiones que tuvimos, con casi 30 lanzamientos entre faltas laterales y saques de esquina", subraya el técnico para decir que "con el 1-0 al descanso teníamos que haber cerrado el partido. Si no estamos bien no estamos, pero nos hubiésemos ido con 1-0 para casa".

Tras la derrota se plantea un futuro complicado en las 14 jornadas que quedan para que finalice el campeonato. "Esto cambia de una semana a otra. Iremos a ganar a Catarroja, porque mientras tengamos un soplo de vida tenemos que ir a ganar a donde sea. Hoy será complicado, pero a partir el miércoles, jueves y viernes cargaremos las pilas para el intentar ganar el sábado en Catarroja", partido fijado para las cuatro y media de la tarde, con dirección arbitral a cargo de Miguel Bosch Doménech, de Benicarló.