La Administración se está encargando de pinchar la «burbuja» de las plantas fotovoltaicas en Villena. Cinco de los veinte proyectos presentados al Ayuntamiento durante los dos últimos años han sido rechazados por afectar negativamente a la flora y fauna o por su impacto visual en el paisaje. En cualquier caso todavía quedan nueve proyectos pendientes de la resolución definitiva de la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica y otros seis que no han sido todavía valorados por los técnicos municipales. En los últimos meses el consistorio villenense ha emitido informes sobre 14 solicitudes de plantas fotovoltaicas presentadas para su implantación en el término municipal, alertando de la situación de los expedientes o el incumplimiento de alguna de las condiciones preceptivas para su desarrollo. De momento ya son cinco los proyectos para implantar centrales solares rechazados: cuatro por parte de la Administración autonómica y uno por el propio Ayuntamiento. «Nosotros estamos realizando el trabajo que nos corresponde con rigor, sin prejuicios ni ideas preconcebidas. Intentando defender nuestro territorio y el cumplimiento del mandato europeo que nos obliga a todos a potenciar la energía solar, o cualquier otra que no genere emisiones, especialmente en una situación de crisis mundial por los precios del gas y los combustibles fósiles», ha explicado el concejal de Urbanismo, Javier Martínez. Los proyectos La Encina I y II, Valfortec Villena I-Bis, AL FV1 Alhorines, AL FV3 Alhorines han sido rechazados por parte de la Conselleria de Medio Ambiente al contar con una Declaración de Impacto Ambiental desfavorable.
En el caso de la pedanía de La Encina también ha influido el impacto paisajístico en un poblado ferroviario que, el pasado mes de agosto, fue declarado Bien de Relevancia Local por la Generalitat Valenciana. Una quinta propuesta de planta solar -Fotovoltaica Prados- ha sido descartada por el propio Ayuntamiento al no lograr la compatibilidad urbanística por haberse planteado realizar en un humedal de la localidad. Tras rechazar el último pleno la petición de los Verdes, que pretendía aprobar una moratoria de dos años en la concesión de autorizaciones para centrales fotovoltaicas, el edil de Urbanismo ha lanzado un mensaje de tranquilidad a la población. «El Ayuntamiento sigue su ritmo de trabajo analizando cada uno de los proyectos energéticos, informando paulatinamente de las circunstancias y las necesidades o posibles afecciones sobre el territorio, la fauna o flora del espacio donde se pretende ubicar o la necesidad de disponer de documentos preceptivos, como la declaración de impacto ambiental», ha indicado Javier Martínez.
Cabe recordar que la tramitación administrativa de los proyectos de plantas fotovoltaicas puede durante entre uno y dos años dependiendo de su complejidad técnica, magnitud y ubicación. Villena es en la provincia el municipio con más peticiones. La razón se debe básicamente a su enorme término -345,6 km²- unido a su amplia superficie agrícola de secano en terreno llano, sus numerosas horas de radiación solar y la proximidad de potentes estaciones eléctricas donde poder evacuar toda la electricidad generada.
