La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) ha procedido a incoar al Ayuntamiento de Monóvar un expediente de diligencias previas, por la denuncia presentada por los vecinos del paraje rural Charco Amargo, sobre la acumulación de residuos sólidos en una rambla que conecta con el río Vinalopó.
Los hechos denunciados se remontan a la noche del pasado 5 de mayo y a la madrugada del día 6 del mismo mes cuando “los vecinos observamos cómo se dirigía, a la estación de bombeo de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de la Mancomunidad Intermunicipal del Valle del Vinalopó, un camión cisterna de la empresa de recogida de residuos. Una de las vecinas afectadas se dirigió a la zona donde se encuentra la desembocadura del aliviadero y, de este modo, pudo comprobar como salía una gran cantidad de agua y restos de todo tipo, cuando en ese momento ni en los días anteriores había llovido”.
Los hechos fueron grabados en video ante la presencia de una patrulla de la Policía Local como prueba documental.
Los vecinos en el escrito de denuncia remitido al presidente de la CHJ, Miguel Polo, a la presidenta de la Mancomunidad Intermunicipal del Valle del Vinalopó y alcaldesa de Petrer, Irene Navarro, y al alcalde de Monóvar, Alejandro García, hacen constar y les recuerdan la existencia del Real Decreto 849/1986, del 11 de abril, por el que se aprueba el Reglamento del Dominio Público Hidráulico que “prohíbe, en tiempo seco, los vertidos por los aliviaderos”.
Para los vecinos de Charco Amargo esta actuación presenta “el agravante de nocturnidad y alevosía, con el único objeto de pasar desapercibidos y de que no nos enterásemos los vecinos, siendo conocedores de la ilicitud de sus actos”.
El escrito también muestra su profunda decepción al presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar al considerar que “el Ayuntamiento de Monóvar no está cumpliendo con su compromiso de recogida selectiva de los sólidos y flotantes y, por su parte, la Mancomunidad que forman los municipios de Elda, Petrer, Monóvar y Sax está incumpliendo claramente las condiciones de la concesión”.
Todo ello ha llevado a los vecinos afectados a solicitar, una vez más, que “simple y llanamente se cumpla la Ley y se asuma, por parte de las tres entidades implicadas, la responsabilidad que derive en una solución definitiva”.
