Hércules: levantarse o lo de siempre

Es el día de levantarse, de demostrar que sí, que hay algo más que palabras huecas y oratoria aprendida. El Hércules necesita despertar. Para eso contará con la ayuda de su afición, que tiene el acceso gratis al estadio para celebrar el último gran acto de la semana del centenario, el que debe servir para reconciliar al equipo de Ángel Rodríguez –y su irregular propuesta– con el público, decepcionado después de encadenar tres semanas de fútbol ramplón en las que únicamente se ha sumado 1 punto.

Ganar valdría para sosegar los ánimos, para recobrar la fe en una idea, la del entrenador, que se está demostrando insuficiente para lo que él mismo pretendía desde su presentación: ser campeones. A ocho puntos del líder (Teruel) y a solo tres del descenso, el Hércules está obligado a mejorar sus prestaciones para no verse asomado a un precipicio oscuro.

El Hércules - Peña Deportiva del domingo es gratis

En evidente recesión, el juego blanquiazul se ha vuelto previsible, inane, desvencijado en la fase ofensiva y vulnerable de más en la contención, potenciado esto último por la concatenación de errores individuales y la angustiosa falta de trabajo en la interpretación de la defensa, sin ayudas, con el equipo partido y con los futbolistas de banda desentendiéndose de este cometido mientras malgastan fuerzas en una presión alta de todo punto inservible.

Ángel Rodríguez prevé situar a César Moreno en el mediocentro y no descarta incluir a Raúl Ruiz con perfil atacante

La previsión meteorológica fija una temperatura de 26º al mediodía (12:00 horas), momento en el que arranca el choque frente a la Peña Deportiva de Santa Eulalia. El conjunto ibicenco, que no ha ganado nunca en el Rico Pérez, llega a Alicante en un momento dulce, tercero, y con el liderato a tiro. Para el vestuario insular, el regreso al campo del Hércules no será grato. Buena parte de los que hoy salten al césped recordarán que allí mismo se quedaron a las puertas del ascenso el curso pasado, cuando perdieron la final del «play-off» frente al Real Murcia, entre ellos su entrenador, Manolo González, que cumple su segunda temporada en Santa Eulalia tras brillar muchos años en Badalona.

Ángel Rodríguez advirtió el viernes que no hará excesivos cambios, que no cree en las revoluciones, que su misión es sacarle rédito a los que juegan habitualmente. A pesar de estas palabras, habrá cambios. César Moreno volverá al mediocentro, y la única duda es si lo hará como el curso anterior, como pivote con dos interiores por delante, o si jugará como mediocentro de posición por detrás de Míchel, con Maxi cubriéndole la espalda.

Las probabilidades de que Nico Espinosa forme de inicio son remotas a tenor de lo trabajado durante la semana. Si se queda en el banquillo, la opción de que Raúl Ruiz se ubique en banda con perfil atacante es muy factible, o sea, que recupere el rol que le dio Sergio Mora y con el que anotó 5 goles. Eimil se quedará definitivamente con el lateral derecho.

En el izquierda hay más dudas porque Felipe y Marcos Bravo mantienen una bonita pugna por la titularidad que demuestran en cada sesión de trabajo. Obedeciendo al discurso del ex técnico del Pontevedra, el sistema se mantendrá y habrá un único delantero en la punta: Harper o Ander Vitoria. El vasco ha mejorado sus prestaciones en Fontcalent, pero al leonés le sigue convenciendo más el escocés.

Ganar a un equipo invicto el día que todo el mundo espera que lo hagas a pesar de que tu dinámica sea bastante peor que la de tu adversario es uno de esos exámenes que marcan tu destino. Una victoria con la mejor entrada en el estadio en lo que va de campaña potenciará la ilusión, cualquier otra cosa reinstalará en la grada un pensamiento muy persistente: más de lo mismo... otra vez.