Migraña

Por Beatriz García

Se suele asociar con un dolor de cabeza, pero va más allá... ¿Qué es la migraña?

La migraña es una enfermedad que se presenta en forma de ataques episódicos y recurrentes en el tiempo. Los ataques, que son muy discapacitantes, duran habitualmente entre 3 a 5 días y la persona que los sufre tiene unos síntomas muy característicos.

La migraña tiene una expresión grave de la enfermedad que es lo que denominamos técnicamente migraña crónica que son pacientes que tienen más de 10/15 días de síntomas al mes.

¿Cuáles son esos síntomas?

Las personas con migraña tienen dolor de cabeza habitualmente, a veces mareos, sensación de vértigo, dificultad para poder concentrarse y tienen especial sensibilidad a la luz y al ruido. Junto al dolor, que habitualmente empeora con la movilización de la cabeza, suelen aparecer otros síntomas como náuseas o vómitos.

No todas las migrañas son iguales, así que también nos encontramos con otros síntomas que son característicos de la “migraña con aura” como son cambios en la visión, la dificultad para poder hablar, la pérdida de fuerza o el entumecimiento.

¿Cuál es el perfil del paciente?

Es una enfermedad que afecta a lo largo de toda la vida, pero hay un pico de incidencia a partir de la pubertad en el que la enfermedad se expresa más en mujeres que en hombres. En adultos la migraña afecta claramente más a mujeres, entre los 20 y los 50 años. A partir de la tercera edad se iguala el porcentaje de afectación en mujeres y hombres.

La prevalencia en España es del 12%. Afecta a un 18-20% de las mujeres y un 8% en hombres.

¿Se sabe por qué hay más mujeres afectadas que hombres? ¿Cuáles son los factores que nos hacen más proclives a padecerla?

Una persona tiene ataques de migraña porque tiene una predisposición genética que en la mayoría de las personas es hereditaria. Es decir, hay familias con tendencia a tener migraña y otras que no. A partir de aquí, cuando una persona tiene esta predisposición genética, uno de los factores principales que desencadenan los ataques de migraña es el cansancio, que puede ocurrir por motivos físicos, emocionales, de estrés o la mezcla de todos ellos.

En cuanto a la afectación mayor en mujeres que en hombres, en migraña, al igual que en otras muchas enfermedades, todavía tenemos mucho que investigar sobre el impacto hormonal en el cuerpo en general y en el cerebro en particular. Lo único que sabemos es que la migraña es una enfermedad donde hay más excitabilidad cortical en el cerebro. Se cree que, además, es un cerebro que tolera peor los estímulos cambiantes como, por ejemplo, una luz que parpadea o ruidos seguidos muy constantes… Este tipo de cambios neurosensoriales pueden desencadenar ataques de migraña. Con esto lo que quiero decir es que pensamos que quizás el cambio en los niveles de estrógeno es uno de los factores que desencadena los episodios de migraña. Esto hay que imaginarlo como llegar a un umbral a partir del cual se desencadenan los ataques… Vas sumando factores y uno de esos factores pueden ser los cambios hormonales cíclicos que ocurren en la mujer.

¿Es posible prevenir la aparición de una crisis y la cronificación de la migraña?

Podríamos hablar, para ello, de 3 pilares del tratamiento:

• Llevar un estilo de vida saludable para no tener ataques: minimizar el cansancio. Para ello hay que recuperar energía durmiendo y comiendo adecuadamente, así como cuidándonos, realizando actividad física.

• Tratamientos preventivos cuyo objetivo es reducir la frecuencia, duración y la intensidad de los ataques.

  Hay personas en los que los ataques de migraña van en una escalada muy clara de aumento, tanto de la frecuencia como de la violencia de los ataques. Esta escalada de aumento suele identificarse en la mayoría de los casos, es decir “la vemos venir”. Y es aquí cuando hay que incidir lo antes posible con estos tratamientos preventivos.

  Es frecuente encontrarnos con pacientes que se resisten a ello porque prefieren no tomarse nada. El problema de esto es que, cada vez tenemos más evidencia que demuestra que, si no inician tratamientos preventivos a tiempo, la enfermedad se establece de una manera que no se puede revertir.

• Tratamiento del ataque: tenemos fármacos que pueden ayudar a controlar toda la sintomatología. Aquí es importante tener en cuenta que hay que tratar rápido el ataque ya que si no, el fármaco no se absorbe bien y por lo tanto es menos eficaz.

¿Existen factores ambientales o del estilo de vida que puedan modificar las personas que sufren migraña para reducir la frecuencia o la intensidad de los episodios? ¿Qué le recomendaría a un paciente con migraña?

Mi recomendación sería, como indicaba en la pregunta anterior, llevar un estilo de vida lo más saludable posible, evitando en la medida de lo posible cualquier tipo de cansancio ya sea físico o psíquico. Otra recomendación sería no abusar de la cafeína.

Por último, mi consejo sería sobre todo que las personas que sufren migraña no se den por vencidas, que no desistan y que busquen al profesional adecuado porque la medicina y los médicos tenemos maneras de poder ayudarlas.

¿Qué avances ha habido en su tratamiento? ¿Cuáles son las opciones disponibles actualmente?

Ahora tenemos un nuevo tratamiento preventivo que bloquea una proteína que tiene un acrónimo CGRP. Otra alternativa de tratamiento es la inyección de bótox y por último los triptanes para el tratamiento agudo.

¿Hacia dónde apunta la investigación? ¿Qué se puede esperar en un futuro próximo en cuanto al abordaje de la migraña?

Estamos investigando sobre nuevos mecanismos moleculares para intentar controlar la enfermedad y también se está desarrollando mucha investigación en torno a la genética de la migraña, para entender mejor si pudiera haber maneras de controlar la enfermedad o diagnosticarla a través de biomarcadores.