Así se 'fabrica' agua en Cataluña directamente desde la niebla

El agua es una de las claves del futuro de la humanidad. Es el eje de la vida. En un mundo cada vez más árido, cada gota cuenta, y la búsqueda de fuentes alternativas se vuelve cada vez más urgente. Pero, ¿existe algún lugar en el que haya agua y no se haya buscado aún?

Más del 70% de la superficie de la Tierra está cubierta de agua, lo que representa un volumen permanente de 1.386.000.000 kilómetros cúbicos. Con todo ese volumen, ¿cómo es posible que haya extensas áreas del mundo sin agua, en las que incluso la gente se muere de sed?

Ocurre que de toda esa ingente cantidad, el agua dulce representa apenas el 2,5%. Y, de ese exiguo porcentaje, gran parte es inaccesible, porque un 68,7% del mismo está ‘atrapado’ en masas de hielo y otro 30% es agua subterránea.

Solo el 1,2% es agua superficial, repartida entre el permafrost (69%), lagos (20%), ríos (0,49%) y en el suelo, la atmósfera y los seres vivos (por término medio, todas las células están formadas por un 70% de agua, igual que la Tierra).

En paralelo, la población mundial no deja de crecer, lo que acrecienta la necesidad de agua, para la agricultura, la industria, la producción eléctrica y el uso doméstico, principalmente. Según un estudio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) la demanda de agua se disparará en 2050 hasta un 55% sobre la registrada cuando comenzó este siglo. 

Pero ha quedado otra respuesta por responder, la de si existen lugares inexplorados de los que se pueda obtener agua. La respuesta es sí. Por ejemplo, de la niebla, que no deja de ser mas que una nube con gotas minúsculas en suspensión.

Útil para beber

El proyecto LIFE Nieblas, cofinanciado por la Unión Europea, ha permitido desarrollar en los últimos cuatro años tres innovadores sistemas para captar agua de la niebla. En España. Sistemas, además, que permiten captar agua de la niebla de manera barata y eficiente.

El agua captada de la niebla es útil para reforestar o para regar los lugares con mayores necesidades del líquido de la vida, pero también para beber. De hecho, uno de los sistemas ha servido para recolectar un tipo de agua bautizada como ‘Nieblagua’, que se comercializa como potable.

En todos caso, el objetivo del proyecto va más encaminado a recolectarla para su uso en la restauración de zonas degradadas y áridas, mediante replantaciones, y en el uso agrícola en zonas del mediterráneo para diversificar las fuentes de agua en momentos de necesidad.

Después de años de investigación y pruebas en las Islas Canarias, los socios principales del proyecto LIFE Nieblas, el Centro de Investigación Ecológica y Aplicaciones Forestales (CREAF), la empresa pública canaria GESPLAN, el Instituto Canario de Investigaciones Agrarias (ICIA), el Instituto Tecnológico de Canarias (ITC) y el Cabildo de Gran Canaria, han presentado los resultados. El objetivo es ahora impulsar el uso de estos sistemas en toda la Península.

Los tres sistemas desarrollados para ‘atrapar’ agua de la niebla utilizan diferentes de materiales y tecnologías y han sido capaces de captar más de 500 litros de agua por metro cuadrado en 10 meses.

Hasta julio de 2023 se habían recogido 35.000 litros con 27 captadores de las diferentes tipologías desarrolladas, pero son 215.000 los litros que se pretende captar durante todo el desarrollo del proyecto.

El modelo, las hojas de los pinos canarios

La investigación ha permitido también desarrollar sistemas más rudimentarios pero muy eficientes para asegurar que las plantaciones de árboles tengan éxito y superen los veranos secos. Todas estas innovaciones tienen potencial para instalarse en otras localizaciones de España y Portugal. çDe hecho, el proyecto está estudiando ahora su viabilidad en Cataluña.

Los investigadores han tomado como modelo las hojas de los pinos canarios, que tienen ‘un secreto’: están diseñadas para atrapar las minúsculas gotas de la niebla. Esta observación naturalista ha inspirado una idea dentro del proyecto LIFE Nieblas, que ha dado lugar al captador de lluvia más eficiente y versátil de todos: el colector de acículas.

Es un colector de fácil montaje y pequeño tamaño, que presenta unos travesaños de los que cuelgan unos filetes metálicos similares a las acículas de los pinos canarios. Quince estructuras (unos 9 metros cuadrados) han captado hasta 525 litros por metro cuadrado durante los 10 meses de prueba en Canarias.

También se han testado otros dos modelos más, mucho mayores: los colectores de torre, que presentan dos cubiertas distintas, una de malla kiwi y otrs de malla volumétrica. Uno solo del tipo malla volumétrica ha logrado capturar hasta 379 litros por metro cuadrado.

No son prototipos, ya se han probado, y funcionan. Son "estructuras listas para salir al mercado y utilizarse en territorios donde se cumplan las condiciones de niebla y viento", comenta Vicenç Carabassa, investigador del CREAF y supervisor científico Life Nieblas.

Los impulsores del proyecto han testado asimismo un modelo mucho más rudimentario, que sirve tanto a las reforestaciones como a las plantaciones agrícolas. Es un colector individual, una estructura tubular rígida que rodea a los árboles plantados para protegerlos de las cabras u otros herbívoros.

La potencialidad de Cataluña

La estructura, cuando se recubre de la misma malla kiwi que los colectores de torre, es capaz de atrapar agua de la niebla a la vez que mantiene la humedad y evita la depredación de los brotes.

"Hasta ahora estas restauraciones se regaban llevando agua con camiones cisterna, o incluso con helicópteros, con costes que podían llegar a 260 euros por árbol vivo después de dos años", subraya Gustavo Viera, técnico de GESPLAN y coordinador del proyecto.

LIFE Nieblas estudia ahora si esta tecnología más simple funciona bien en todas las zonas de influencia directa del mar mediterráneo. Para ello, en colaboración con el proyecto RESTARC (persigue formar emprendedores en Economía Circular), se han instalado cerca de 100 colectores individuales en replantaciones de especies mediterráneas como el acebuche o el lentisco en una cantera en proceso de restauración en el Garraf.

Cataluña puede ser "un lugar con potencial para obtener agua de la niebla de diferentes zonas del territorio", comenta Vicenç Carabassa.

El estudio ha contado con expertos en sistemas de captación de agua de niebla, pero también otros en campos tan diversos como restauración de espacios degradados, evaluación de procesos de regeneración de los suelos, sensorización de plantaciones, sistemas de riego y meteorología.

Han participado, aparte de las entidades ya citadas, los propietarios de los terrenos en los que se han desarrollado las pruebas, la Universitat Autònoma de Barcelona, la Universidad de La Laguna, la Heredad de Aguas de Arucas y Firgas y la Comunidad Intermunicipal Viseu Dão Lafões de Portugal.

Proyecto LIFE Nieblas: https://www.lifenieblas.com/

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