Opinión

La uva del Vinalopó endulza la precampaña de Ximo Puig y Carlos Mazón

Mireia Mollà, Ximo Puig y Carlos Mazón en el acto de apertura de la campaña de la uva.

Mireia Mollà, Ximo Puig y Carlos Mazón en el acto de apertura de la campaña de la uva. / Alex Domínguez

No debe engañar la foto. Por más chusca que resulte, hay que verla por el lado positivo y agradecer a nuestra clase política que conserve el buen humor en general y más que conserven el buen humor en el trato entre ellos. Y también hay que entender el momento. Estamos ya en precampaña y a un político de raza se le debe notar el pedigrí: en cuanto topan con una cámara se ponen más nerviosos que cuando un actor ve público. Además, el toque desenfadado de la imagen no debe engañar en otro sentido aún más importante, porque es una excelente noticia que los dos políticos del momento en la Comunidad Valenciana, Ximo Puig y Carlos Mazón, dieran ayer muestras de un compromiso tan firme con la uva embolsada del Vinalopó. El vía crucis que está sufriendo esta denominación clásica del campo alicantino en este año es un símbolo sangrante de lo que le está pasando a nuestro sector agrícola. Precios que no cubren los costes aunque el producto está más caro que nunca cuando llega al consumidor, reducción de cultivos para abaratar la producción, inevitable caída de la producción a niveles nunca vistos, graves problemas con los seguros agrarios, con la energía, los fertilizantes, el omnipresente problema del agua y un largo etcétera de desgracias que asfixian al agricultor hasta el punto de tener que dejar de pagar incluso al consejo regulador que es quien mantiene con campañas de promoción el renombre del producto. Ayer en Novelda, Puig y Mazón pudieron ver el problema en toda su dimensión y prometieron ayudas. Junto a la consellera Mireia Mollà el alcalde de Novelda, Fran Martínez, y el rector de la UMH, Juan José Ruiz, pudieron oír de boca del presidente del consejo regulador, Pepe Bernabeu, una historia amarga por la reducción de la cosecha, que ahora se empieza a recoger, en más de seis mil toneladas, un 14% menos. Aunque luego acabaran probando las primeras uvas de la campaña y el ambiente se endulzara un poco. Bien está que la calidad de las uvas más famosas de España consiguiera poner por fin de acuerdo en algo a Puig y a Mazón.

Y una cosa más:

La Conselleria de Sanidad ha insistido en que es obligatorio dispensar el medicamento.Además, de permitirse la objeción en algunos casos, plantearía graves problemas al estar las farmacias sujetas a unas guardias.

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