Los 1.770

Alguien que cuide de mí

Alguien que cuide de mí

Antonio Sempere

Antonio Sempere

En total 1.770 espectadores acudieron a ver el fin de semana de su estreno Alguien que cuide de mí, la película con la que ha debutado Elvira Lindo como directora. A pesar del apoyo mediático con que ha contado, de que el proyecto fue apoyado con la participación de TVE, y de que el Festival de Málaga le prestó la jornada de inauguración para que todos los focos estuviesen pendientes de sus actrices el primer día del evento, la recaudación el fin de semana del estreno fue de doce mil euros. Dinero que se reparte, como saben, entre la distribuidora y las salas de exhibición, al que hay que restar el IVA; sólo la cantidad sobrante llegará a la productora. Por lo que si a alguien le quedaban dudas sobre si las películas dependen de las taquillas, quedan resueltas. El cine español está amortizado antes de estrenarlo, de lo contrario sería ruinoso. Cuando un productor continúa levantando proyectos año tras año, con independencia de que las cifras de afluencia a las salas sean exiguas, es que hablamos de variables independientes: los 2 ó 3 millones de euros que cuesta rodar una película media en España no se corresponde en absoluto con sus taquillas liliputienses. Ocurrió con Los girasoles ciegos o La consagración de la primavera en San Sebastián, y se reproducirá con títulos que compitieron en Málaga como Sica, Unicornios o Una vida no tan simple.

Lo que me inquieta es que nadie hable de esto. Ningún medio, ningún espacio cinematográfico de TVE, ninguna revista cultural, lo que convierte el tema en tabú. Los mismos que dieron cancha a Elvira Lindo en la radio, las televisiones y la prensa silencian el llamativo dato de los 1.770 espectadores que acudieron a ver su película. Así la rueda sigue girando.