Opinión

El mundo en la nube

Una imagen del logo de TikTok.

Una imagen del logo de TikTok. / EP

El Congreso norteamericano ha aprobado un proyecto de ley que prohibirá TikTok, una de las aplicaciones más populares en Estados Unidos-y en todo el mundo- por temor a que China la esté utilizando para espiar a los estadounidenses. La empresa tiene un plazo de un año para encontrar un nuevo propietario que no tenga su dirección en China, de lo contrario será prohibido en los Estados Unidos, y eliminado como aplicación. El argumento es que TikTok es un globo espía de los teléfonos estadounidenses. TikTok es propiedad de Byte Dance una empresa china de Internet. La primera medida en ese sentido se tomó en 2020 por orden del presidente, entonces Donald Trump, que le daba un plazo de 45 días. La empresa contraatacó pagando millones de dólares para grupos de presión en la Casa Blanca el Pentágono y el Capitolio incluidos exsenadores estadounidenses y un jefe de las dos campañas presidenciales de Trump. En Estados Unidos utilizan la aplicación 170 millones de personas, más de la mitad de la población. En Europa no andaremos lejos de esas cifras. Varias ramas del gobierno estadounidense y el Ejército de Estados Unidos lo han prohibido en los teléfonos de titularidad gubernamental. Ahora también a los congresistas se le ha recomendado no usar la aplicación de “alto riesgo”. También Rusia ha prohibido que los rusos puedan subir videos o ver los de fuera de su país, desde la invasión de Ucrania, claro está.

Tras diversos informes de empresas especializadas en Internet es difícil exagerar el dominio de TikTok: el año pasado fue visitado con más frecuencia que Google. Supera los mil millones de usuarios. El espectador estadounidense promedio mira TikTok durante 80 minutos al día, más que el tiempo que pasa en Facebook e Instagram juntos. TikTok creció un 67% por ciento entre 2018 y 2021, TikTok ha hecho saltar por los aires el modelo de lo que puede ser una red social. en lugar de construirla en base a intereses y amistades o “me gusta”, elegidas por los usuarios, determina los intereses mediante una serie interminable de vídeos que selecciona su algoritmo y aprende los gustos nuestros con cada segundo que miramos, pausamos o nos desplazamos. El algoritmo "para ti" como lo llama TikTok nos dice lo que queremos ver. Construye gradualmente perfiles de gustos de los usuarios no a partir de lo que eligen sino de cómo se comportan. Esa es la diferencia con el resto de las redes. La influencia cultural de TikTok en una nueva generación de medios ha provocado efectos dominó sorprendentes. El modelo de TikTok pronto podría dar forma a todo Internet. El papel de TikTok como fuente de noticias ha aumentado. La cuenta de TikTok sobre libros,- #BookTok- pesca agricultura, juegos de rol, etcétera son líderes en cada especialidad con miles de millones de seguidores. Su éxito ahora es ofrecer su sistema a los anunciantes. Los ingresos publicitarios se triplicaron en un año. Y está ampliando sus funciones desde minijuegos o currículos laborales hasta lecturas de Tarot, recorrido por apartamentos y ventas a distancia. ”Es un fenómeno que ha asegurado un dominio incomparable de la cultura y de la vida cotidiana e intensificó el conflicto entre las mayores superpotencias del mundo”. “Podría definir la cultura y el entretenimiento durante una generación” (Drew Hardwell, especialista del Washington Post en algoritmos e inteligencia artificial, y otros. ”Parte 1: Cómo TikTok se comió Internet. Parte 2: Lamento que te hayas vuelto viral. Parte 3: Mientras Washington vacila, Beijing ejerce el control” Octubre de 2023).

Edad, ubicación, número de teléfono, fotos faciales, grabaciones de voz, historiales de búsqueda, incluso sobre la salud y las finanzas, son datos recogidos por la mayoría de las redes sociales, no solo por TikTok. Son datos que los corredores de datos- Oracle entre otras- venden a granel de las personas que están en las redes incluso a compradores extranjeros. No hay una sola propuesta de protección de la privacidad que se aplicaría a todas las empresas no solo a las chinas. Nuestro avatar, nuestra representación gráfica de la identidad virtual de un usuario en entornos digitales, sea individual y colectiva, está en el mercado y su formación limitada por la censura de quien controla a las empresas- en el caso de TikTok claramente China que impide el acceso a informaciones sobre la matanza de la plaza de Tiananmen o de los campos de detención, por ejemplo.

Nuestros datos en la nube y nuestros gobiernos democráticos en las nubes.