Bastidas: “El Síndic saca los colores a Puig y evidencia que su Gobierno es un lastre para las políticas sociales en la Comunitat”

La reacción de la oposición al informe del Síndic de Greuges no ha tardado en llegar y esta mañana la portavoz de Política Social del Grupo Popular en las Cortes, Elena Bastidas, ha afirmado que el documento “saca los colores a Puig y evidencia que su Gobierno es un lastre para las políticas sociales en la Comunitat”. Bastidas ha señalado que la memoria anual de 2022 presentada ayer por el defensor valenciano, Ángel Luna, “demuestra que las personas más vulnerables siguen siendo olvidadas por la administración de Puig, que tarda meses, e incluso años, en emitir resoluciones y aprobar medidas para paliar su situación”.

Así, la diputada del PPCV ha señalado que los retrasos en la tramitación de la Renta Valenciana de Inclusión (RVI) “siguen a la orden del día, con menciones específicas a disfunciones y problemas de gestión y tramitación e incluso al rechazo por parte de la Conselleria de Aitana Mas de ayudas a personas que cumplían todos los requisitos”. La portavoz de Política Social ha señalado que “precisamente las personas en mayor grado de vulnerabilidad “requieren una respuesta rápida y no ser sometidas a un doble castigo por parte del Gobierno valenciano”.

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Mirando hacia área social

Bastidas ha señalado que Aitana Mas “ha seguido con los mismos errores que su antecesora, Mónica Oltra”. “No hay ningún avance. Siguen las demoras en la resolución de expedientes para conseguir una prestación y lo mismo ocurre en dependencia”, ha señalado. Asimismo, ha alertado del retraso en la emisión de títulos de familias numerosas y monoparentales, lo que conlleva una pérdida de beneficios, o la necesidad urgente, tal y como recoge el informe, de agilizar el programa de acogimiento familiar.

“Los servicios sociales siguen teniendo el récord en cuanto al número de quejas de los ciudadanos ante el Síndic de Greuges, con un 35,5% del total. La administración no puede suponer un tapón para el ciudadano y poner cortapisas en cuestiones de transparencia, de atención y de resolución de expedientes. El Gobierno de Puig lleva ocho años relegando las políticas sociales, que se limitan a las buenas palabras, pero se atascan en los hechos y resultados”, ha concluido.

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