Esto es lo que le pasa a tu cuerpo si comes helado todos los días

Te contamos las ventajas y los inconvenientes de este rico alimento y cómo preparar uno saludable en casa en 5 minutos

Qué pasa si comes helado todos los días

Qué pasa si comes helado todos los días / B-D-S Piotr Marcinski/Shutterstock

Azucena Mendieta Delgado

Azucena Mendieta Delgado

Comer helado todos los días durante el verano podría tener efectos variados sobre el cuerpo, dependiendo del tipo de helado, la cantidad y la constitución individual de cada persona. Así pues comer este alimento tan típicos de los meses más calurosos del año puede tener pros y contras.

Ventajas de comer helado todos los días

Primero, hablemos de las ventajas. El helado, especialmente aquellos que son de leche entera o cremosos, puede ser una fuente rica de calcio y vitamina D, que son esenciales para la salud ósea. En verano, cuando las temperaturas son altas, el helado también puede ser una forma deliciosa y refrescante de mantenerse hidratado. Algunos helados también contienen probióticos, que pueden promover la salud intestinal.

El helado, en general, puede estimular la producción de serotonina, un neurotransmisor que ayuda a mejorar el estado de ánimo y a aliviar el estrés. En consecuencia, el consumo diario de helado podría tener efectos positivos en el bienestar emocional durante el calor del verano.

Inconvenientes de comer helado todos los días

Pero también existen inconvenientes. La mayoría de los helados están cargados de azúcar y grasa, lo que puede resultar en un aumento de peso si se consume en exceso y no se compensa con suficiente actividad física. Además, el consumo regular de alimentos azucarados como el helado puede aumentar el riesgo de desarrollar caries, enfermedades del corazón y diabetes tipo 2.

El consumo diario de helado también podría afectar negativamente la digestión en algunas personas. Por ejemplo, aquellos que son intolerantes a la lactosa podrían experimentar hinchazón, gases o diarrea. Además, los helados suelen ser altos en grasa, lo que puede llevar a la acumulación de grasa en el hígado y otras enfermedades digestivas si se consumen en grandes cantidades regularmente.

El consumo frecuente de helado también puede fomentar el desarrollo de patrones de alimentación poco saludables, particularmente en niños. Puede crear hábitos de gratificación inmediata y formar un patrón de recurrir a los alimentos dulces para manejar el estrés o las emociones negativas.

Cómo hacer un helado sano y sin azúcar

Si quieres tener tu propio helado sano y saludable y que podrás comer muy a menudo aquí te dejamos una receta. 

Sólo tendrás que congelar dos plátanos en rodajas y unos frutos rojos y/o fresas. Estos últimos los puedes comprar en cualquier supermercado, ya que los venden ya congelados. 

Cuando los tengas congelados ponlos todos en una batidora o procesador de alimentos y tritúralo. Añade una leche que te guste (vegetal o de vaca). Si añades dos plátanos y unos 150 gramos de frutos rojos con 50ml de leche será suficientes. Tritúralo todo junto y ya tienes tu helado listo para consumir o para guardar en heladeras para el día siguiente.