El sondeo, realizado entre marzo y mayo a partir de entrevistas a más de 30.000 personas, revela la actitud de los ciudadanos hacia el cambio climático, considerado por el 62% de los europeos el segundo problema global "más grave", tras la pobreza.
Mientras en la mayoría de estados miembros los problemas más graves mencionados son, por orden, la pobreza y el cambio climático, en España se indica en primer lugar la escasez de recursos (mencionado por el 70%), seguido del terrorismo internacional (64%) y el calentamiento global (61%).
Los españoles son los más ignorantes en cuestiones como si el calentamiento global se puede frenar (algo que el 18% de los encuestados dice no saber), o si la lucha contra ese problema producirá efectos positivos para la economía (el 39% afirma ignorarlo, sólo superados por los turcos, con el 41%).
La mayoría de europeos (55%) son conscientes del impacto de las emisiones de CO2 sobre el cambio climático, mientras que el porcentaje en España se sitúa en el 40%.
Además, un 29% de los españoles dice no saber si ese factor puede tener una repercusión sobre el calentamiento global (sólo superados por los rumanos y los malteses).
Por otra parte, en Europa, un 44% asegura que estaría dispuesto a pagar más por la energía procedente de fuentes que emiten menos gases de efecto invernadero, algo a lo que sin embargo se opondría el 30% de la población.
En España un 40% gastaría más por el consumo de energías limpias mientras que un 23% no lo haría.
El sondeo pone de relieve asimismo que un amplio porcentaje de ciudadanos europeos cree que no se está haciendo lo suficiente para combatir el problema.
En particular, el 76% de los encuestados en la UE denuncia que las empresas no están tomando suficientes medidas al respecto y el 64% acusa a los gobiernos de un compromiso insuficiente.
Además, para el 58% la Unión Europea no hace lo bastante para luchar contra el calentamiento global.
El 61% de los ciudadanos entrevistados asegura que toma medidas en su vida cotidiana para contribuir a combatir el calentamiento del planeta, con acciones como la separación de las basuras para su reciclaje o la reducción del consumo de energía y agua.
El 73% de los españoles clasifica las basuras para el reciclaje, el 55% asegura que economiza en energía y gasto de agua y el 24% dice optar por modos de transporte ecológicos.
"El mensaje es que la mayoría de europeos respaldan los objetivos comunitarios o quieren que se vaya incluso más allá. Es esencial que el Parlamento Europeo y el Consejo aprueben las propuestas de Bruselas sobre energía y cambio climático de aquí a enero", dijo en rueda de prensa el comisario de Medio Ambiente, Stavros Dimas.
El sondeo tiene en cuenta la opinión de ciudadanos de todos los estados miembros y los tres países candidatos al ingreso (Croacia, Turquía y Macedonia).
