El Ministerio de Sanidad aseguró a través de su portavoz, Lily Sulistyowati, que "las autoridades competentes están examinando la leche china" y "los resultados se conocerán en los próximos dos o tres días".

Como medida preventiva, la portavoz indicó que "los productos (lácteos) chinos quedan prohibidos en el mercado, por el momento".

No obstante, la marca de leche china "Guozhen" podrá seguir vendiéndose en el mercado indonesio gracias a un permiso especial de la Agencia de Supervisión de Medicinas y Comida (BPOM).

Por su parte, el BPOM ha instado a la ciudadanía a denunciar cualquier producto lácteo de origen chino que encuentre en las estanterías de los supermercados y que no cuente con el número de registro obligatorio de la agencia de calidad.

En los últimos días, Japón, Corea del Norte, Malasia, Birmania, Tanzania, Brunei y Gabón, países que importaban leche de China, han prohibido la venta de productos lácteos del gigante asiático.

La crisis sanitaria de la leche adulterada, destapada el pasado 13 de septiembre, ha provocado ya cuatro muertes y ha afectado a unos 53.000 niños, de los que 13.000 continúan hospitalizados, algunos de gravedad.