La Audiencia de Alicante sienta en el banquillo a los presuntos miembros de una red organizada acusada de haber simulado accidentes de tráfico en la ciudad de Alicante con el objetivo de cobrar la indemnización del seguro. Las compañías les reclaman cantidades que suman cerca de 50.000 euros mediante este sistema. Las aseguradoras consideran que entre todos formaban parte de un grupo organizado cuyo objetivo era simular o inventar accidentes de tráfico con el objetivo de estafarlas. La Fiscalía reclama once meses de prisión por estafa procesal y simulación de delito; mientras que las aseguradoras reclaman otros dos años de cárcel más.
Los hechos ocurrieron entre los años 2009 y 2015 después de que varias compañías de seguros empezaran a detectar varios accidentes sospechosos. Entre todas contrataron los servicios de un detective privado para llegar a la conclusión de que éstos ni quiera habían ocurrido. Se daba la circunstancia de que en todos ellos había implicados personas de una misma familia o que eran conocidos entre sí. De esta investigación, las compañías concluyeron que quince de estos accidentes eran simulados con el propósito de cobrar una indemnización. La mayoría de estas colisiones consistieron en la caída del conductor de una moto que habría sido embestida por detrás por un turismo mientras estaba esperando a que cambiara el semáforo.
Eran tiempos en que cada vez que llegaba una notificación por un accidentes, se pagaba sin apenas hacer más comprobaciones. En ninguno de ellos, llegaba a intervenir ni la Policía Local, ni la Guardia Civil, por lo que la única prueba de que habían ocurrido eran las afirmaciones de los acusados. A los juzgados llegaban las denuncias por estos accidentes de tráfico y se resolvían mediante juicios de faltas. La alerta saltó después de que en un juicio por uno de estos impactos sospechosos, supuestamente ocurrido el 4 de diciembre de 2013, en la sentencia el magistrado ni siquiera encontró probado que éste se hubiera producido. Por este motivo las aseguradoras empezaron a revisar todos los accidentes en los que estas personas hubieran estado implicados durante ese periodo.
Retirada de acusaciones
Con el paso de los años, no todas las compañías han llegado hasta el final y han renunciado a reclamar a los procesados el dinero de la indemnización que les pagaron. La Fiscalía solo acusa a cinco de los implicados por un único accidente y no ve probado que el resto de los siniestros fueran simulados; mientras que las aseguradoras que se mantienen en el proceso son Alcoyana Seguros y Mapfre. Hecho que había motivado que se mantuvieran las imputaciones para algunos a pesar de que la compañía había renunciado. La consecuencia fue este lunes en la misma sala de vistas hasta seis acusados recibían la comunicación de que se había retirado la acusación contra ellos. El abogado Pablo Soriano, que representa a Alcoyana Seguros, se encargaba de anunciarlo en la sala al inicio de la vista oral. Es el caso de una acusada defendida por el abogado Alberto García Rozalén que había sido llevada al banquillo por hechos que ni siquiera aparecían en el auto de apertura de juicio oral. La causa para ella está archivada.
El juicio tenía que haber arrancado este lunes en la Sección Segunda de la Audiencia pero tuvo que suspenderse al detectar que al menos tres de los acusados estaban sin abogado y se ha tenido que aplazar hasta el mes de noviembre, mientras se solventa esta situación.
