Absuelven a una pareja acusada de traficar con 17 kilos de cocaína en Onil

La Fiscalía solicitó sendas penas de ocho años pero la Audiencia no estima probado que fuesen a recoger la droga para llevarla a Madrid

Imagen de archivo de un alijo de cocaína.

Imagen de archivo de un alijo de cocaína. / SALVADOR DE SAS

La Audiencia de Alicante ha absuelto a una pareja detenida en 2015 por un alijo de casi 17 kilos de cocaína intervenido en una nave de Onil por la Guardia Civil y Vigilancia Aduanera al no considerar acreditado que los acusados se hubiesen trasladado allí desde Madrid para trasladar la droga en un coche que contaba con una «caleta» para esconder la droga. Los dos acusados, uno de ellos defendido por el abogado Aitor Esteban Gallastegui, se enfrentaban a una petición de sendas penas de ocho años de prisión y multa de 546.000 euros por parte de la Fiscalía. Otros dos implicados en la causa no pudieron ser juzgados al haber sido declarados en rebeldía por encontrarse en paradero desconocido.

Los hechos declarados probados en una sentencia dictada por la Sección Tercera de la Audiencia de Alicante ocurrieron en el verano de 2015. El 26 de junio fue detectado en el aeropuerto de Barajas en Madrid un envío sospechoso de tres palés de madera de pino procedente de Costa Rica que pesaba más de media tonelada y al ser examinado a través de Rayos X se detectó que presentaba una densidad que podría ser cocaína.

El envío iba destinado a a una nave de Onil a nombre de uno de los acusados que están en rebeldía y un juzgado de Madrid autorizó la entrega controlada de los palés de madera con la droga.

Traslado

Los palés fueron trasladados a la terminal de carga del aeropuerto de Alicante-Elche y desde allí fueron llevados a una nave de Torrellano. Finalmente el envío acabó en una nave de Onil, donde la tarde del 30 de junio los dos acusados ahora absueltos llegaron de Madrid en un coche y fueron detenidos.

El destinatario del envío mantuvo ese día varias conversaciones telefónicas con el varón que llegó en coche en las que usaron «un lenguaje críptico cuyo significado y relación con la sustancia estupefaciente intervenida no ha sido descifrado», según la sentencia. El coche fue examinado por un perro antidroga que marcó una «caleta» vacía donde se podía esconder algo. Sin embargo, la Audiencia señala que no consta sin dicho habitáculo venía o no de fábrica.

En la nave decomisaron cerca de 17 kilos de cocaína pero la Audiencia estima que no se ha probado que la pareja se hubiese trasladado allí para llevar la droga de Onil a Madrid. El tribunal considera débiles los indicios contra los acusados, entre ellos la incriminación realizada por uno de los investigados que está en rebeldía.

Un acusado mantuvo que vino con su novia para comprar un coche y ella dijo que es quiromasajista erótica y por eso disponía de tres teléfonos, uno de los cuales fue el usado por su pareja para hablar con el destinatario de la cocaína.