Aislados nueve reclusos en la prisión de Alicante tras una pelea que se inició mientras jugaban al fútbol

Acaip-UGT y TAMPM denuncian la falta de plantilla y el hacinamiento en el centro penitenciario de Fontcalent mientras Instituciones Penitenciarias niega la aglomeración 

Aspecto que presenta en la actualidad el acceso al centro de cumplimiento de Fontcalent.

Aspecto que presenta en la actualidad el acceso al centro de cumplimiento de Fontcalent. / INFORMACIÓN

Mercedes Gallego

Mercedes Gallego

Nueve internos del centro penitenciario de Fontcalent han tenido que ser aislados tras un altercado entre ellos que comenzó en la zona deportiva del penal de Alicante mientras estaban jugando al fútbol y que continuó en el módulo dos, donde todos están ingresados como preventivos.

El incidente, del que se ha tenido conocimiento gracias a un comunicado del sindicato Acaip-UGT y al que fuentes de Instituciones Penitenciarias quitan gravedad, se ha saldado con dos de los reclusos heridos leves y sin lesiones por parte de los dos funcionarios que tuvieron que intervenir para sofocarlo.  

Según explicaron fuentes conocedoras de los hechos, el altercado comenzó en la cancha del fútbol por motivos aparentemente deportivos, se apaciguó y volvió de nuevo a reactivarse en el interior del módulo que ocupan. 

Los nueve internos se encuentran aislados desde la mañana de este lunes, cuando se produjeron los hechos.

El sindicato ha aprovechado este altercado para denunciar «los problemas que está generando en Fontcalent la falta de adecuación de las plantillas a las necesidades regimentales y estructurales así como los problemas generados por el hacinamiento en el interior que impide una clasificación en atención a las características de los internos», según recogen en el comunicado.

Acaip-UGT liga el incidente con la capacidad que tuvieron varios de los internos implicados de «sustraerse a la vigilancia» para atacar a otro. Según relatan, en el centro penitenciario de Fontcalent, construido para menos de un millar de reclusos, a fecha de hoy se supera esa cantidad «por lo que los módulos residenciales están por encima de su capacidad operativa con prácticamente todas las celdas dobladas».

Y agregan que «nos encontramos con una ratio real de un funcionario para custodiar a más de cien internos, con el añadido de que la arquitectura propia del centro impide la vigilancia de varias instalaciones a la vez, lo que facilita que los reos busquen esos puntos negros para protagonizar graves incidentes».

Instituciones Penitenciarias niega la aglomeración y asegura que «no hay problemas de hacinamiento en Fontcalent ni en ninguna cárcel de España».

El sindicato precisa, por contra, que «la plantilla del área de cumplimiento está infradimensionada, a pesar de que se han incorporado nuevos funcionarios y el déficit se ha reducido, por la apertura del Centro de Inserción Social (CIS) en 2006 al que le siguió el Servicio de gestión de penas y más recientemente, en 2021, la Unidad de madres, todas ellas inauguradas sin ampliar la dotación de empleados públicos».

Clasificación adecuada

Acaip-UGT insiste en que, según las características arquitectónicas del complejo penitenciario, «el déficit de personal supera el 30 por ciento», e incide en la «necesidad» de una clasificación interior de los internos «adecuada» al tiempo que reclama que se actualice la relación de puestos de trabajo del centro penitenciario para «atender las necesidades actuales» y se dote de la plantilla necesaria.  

Según los datos facilitados por el sindicado, durante los años 2021 y 2022 en Fontcalent se registraron 188 peleas entre internos. En el total de los penales del país la cifra ascendió a los 9.000 incidentes con resultado de lesiones. Por lo que concluyen que «en un entorno de conflictividad es imposible realizar las funciones más elementales, por lo que nos encontramos con prisiones en las que no se puede desarrollar el mandato constitucional de reinserción y reeducación».

Otra denuncia

El sindicato de trabajadores penitenciarios Tu Abandono Me Puede Matar (TAMPM), mayoritario en las prisiones de la provincia, también ha denunciado los hechos, así como "la histórica falta de personal y el abandono de la cárcel alicantina". La asociación ya ha denunciado en numerosas ocasiones la actualización del número de efectivos de la plantilla, que considera desfasada tras la ampliación de los servicios derivada de la construcción de la Unidad de Madres, el CIS y el SGPMA, sin un aumento de la dotación de personal. Según fuentes del sindicato, el propio Polideportivo del centro, lugar en el que se produjo el altercado, funciona habitualmente sin la presencia de ningún funcionario de vigilancia ante la imposibilidad derivada de las carencias de la RPT.

Por este motivo, TAMPM solicitará a la Dirección de Fontcalent, de manera formal, la organización cursos oficiales de defensa personal, "una formación que no se ofrece a los empleados de la cárcel desde el año 2019 y que es más necesaria que nunca tras las peleas multitudinarias de ayer y del pasado mes de abril".

Además, la nueva tipología de delincuentes de bandas organizadas que están ingresando en los centros penitenciarios españoles obliga a Instituciones Penitenciarias a formar a su personal, adaptándose a la nueva realidad. En la pelea de ayer participaron presos de Europa del este, sumamente violentos y agresivos, que suelen actuar en grupo y a quienes les cuesta acatar las órdenes de que cesen en su actitud. Para TAMPM, la política penitenciaria debería replantearse.