Cárcel para un hombre de 64 años que abusó de una niña de siete cuando la acompañó a comprar chuches en Alicante

Un vecino de Alicante que tenía 64 años cuando en septiembre de 2022 abusó de una niña de 7 ha admitido este lunes los hechos ante un tribunal de la Audiencia provincial que le ha condenado a cuatro años de prisión, a no acercarse ni comunicarse con la menor durante nueve años y a 19 de inhabilitación para cualquier actividad relacionada con menores. 

El acusado ya fue condenado por un delito de exhibición obscena ante menores de edad en octubre de 2019, por lo que se le impuso una multa que al final tuvo que cumplir con cárcel por impago.

La sala también le condena a indemnizar a la menor con 3.000 euros, los que el encausado se ha comprometido a abonar en doce cuotas a lo largo de un año. 

El relato de los hechos con el que el acusado se ha conformado arranca alrededor de las 20 horas del 28 de septiembre de 2022 en una zona verde de barrio del Pla de Alicante, donde se encontraban jugando varios menores acompañados de sus padres, con los que el acusado entablo conversación.

Permiso para ir a comprar golosinas

Entre el grupo de padres estaba una mujer «a la que en momento dado le pidió permiso su hija de 7 años para acercarse a una tienda próxima para comprar golosinas, ofreciéndose el acusado a acompañarla, a lo que la madre accedió».

El Ministerio Público sostiene que «una vez en la tienda, y guiado por el ánimo libidinoso, el acusado tocó por encima de la ropa los glúteos de la menor en varias ocasiones metiendo su mano entre sus piernas para rozar la zona genital siempre por encima de sus prendas.

A su vez, y mientras le realizaba estos tocamientos», el acusado le dijo a la niña una frase soez de claro contenido sexual.

Penas de 9 años de cárcel para el padre y el tío de una menor por abusos sexuales

La niña ya declaró en su momento, por lo que su presencia no ha sido necesaria para la celebración de la vista oral. Este lunes únicamente se leyó el escrito de acusación ante el procesado, al que también se le dio cuenta del acuerdo alcanzado entre su defensa, el letrado Enrique Giménez, y la acusación pública.  

Una conformidad por la que se reduce de 6 a 4 años la petición de pena a cambio del reconocimiento de los hechos, como así fue, calificados por la fiscal como un delito de abusos sexuales.

Como testigo, únicamente ha comparecido la madre de la menor, quien a la pregunta de si seguía reclamando una indemnización por los abusos de que fue víctima la menor, ha respondido tajante: «quiero todo lo que sea beneficioso para mí y para mi hija. Si por mí fuera, pediría más». 

En la fase de ejecución de sentencia el letrado ya ha avanzado que solicitará la suspensión de la condena de prisión a cambio de su internamiento en un centro para deshabituarse del alcohol, algo sobre lo que tendrá que pronunciarse la acusación pública y acordarlo, si procede, el tribunal.