El futuro Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Algorfa impondrá a los promotores que quieran edificar en el municipio la obligación de comprar parcelas de huerta tradicional y regalarlas después al Ayuntamiento. La jugada, explicada por el alcalde y concejal de Urbanismo, Antonio Lorenzo Paredes (PP), está pensada para asegurar la protección de 800.000 metros cuadrados de terreno agrícola situados al norte del término (junto al río Segura, en el sector más cercano a Almoradí) asumiéndolo como de propiedad municipal.

Los aproximadamente 75 propietarios de estas parcelas de cultivo ya conocen la iniciativa municipal y están de acuerdo con ella, según el propio alcalde. Y es que el Ayuntamiento -después de hacerse con la propiedad de los terrenos- suscribirá con ellos convenios que se podrán alargar durante generaciones para que continúen explotando las tierras de la misma forma que ahora si así lo desean, aunque ya no serán los dueños. Estos propietarios, precisamente, saldrán beneficiados en la venta porque las promotoras estarán también obligadas a pagarles a precio de oro los terrenos; nada de cifras típicas de expropiaciones. Antonio Lorenzo está decidido a que "todo el suelo del municipio tenga el mismo precio", sea cual sea su calificación, de modo que "el urbanizador que quiera hacer un sector tendrá que asumir la compra de la huerta" y hará frente a precios de suelo edificable, aunque estarán comprando suelo agrícola para entregarlo automáticamente al Consistorio.

Reparto

Esta medida, según el primer edil, trata de repartir de forma equitativa los beneficios y los perjuicios del desarrollo urbano. No parece justo, explicó, que quienes tengan terrenos que se marquen en el PGOU como edificables puedan extraer beneficios económicos y que sea todo lo contrario para quienes posean suelo agrícola. Con este sistema, todo el municipio asume por igual el precio de tener terreno agrícola, que "al fin y al cabo es para disfrute de todos, aunque sólo sea en lo paisajístico", manifestó el primer edil.

Otra ventaja para los agricultores será que, al mismo tiempo que podrán seguir cultivando esos terrenos, -y dado que habrán pasado a titularidad municipal- será el Ayuntamiento el que costee las inversiones que precisen, por ejemplo para introducir sistemas de riego por goteo, mejorar caminos o conducciones.

El PGOU de Algorfa comenzó a redactarse en 2005 y señaló esta y otras líneas maestras que guiarán el futuro desarrollo del término. Sin embargo, los trámites se frenaron por el fallecimiento en 2008 del redactor, Miguel Garulo, para quien el alcade tuvo emotivas palabras de recuerdo. Tras un par de años de inactividad el asunto volverá a pasar por el pleno este mismo martes, según adelantó el alcalde (que gobierna en mayoría) para dejar constancia de que ahora toca volver atrás para adaptar los documentos que ya están redactados a los cambios en la normativa y legislación urbanística.

Protección Oficial

El Plan General de Ordenación Urbana contemplará también que se destinen entre 250.000 y 300.000 metros cuadrados de suelo para construir "obligatoriamente" Vivienda de Protección Oficial (VPO).

El proyecto del gran centro comercial sigue sobre el tapete

El PGOU marcará la forma en que el término municipal de Algorfa se va a desarrollar en el futuro. Con el 50% de la población residiendo en las cuatro urbanizaciones que tiene el pueblo (y reuniendo a más de 50 nacionalidades distintas), el casco urbano se extenderá hacia el sur -donde hay menos recursos naturales que proteger, según considera el Ayuntamiento- y todas las avenidas contarán con carril bici y zona de senderismo, lo que plantea el reto de ensanchar algunas vías de comunicación. Así lo explicó el alcalde, Antonio Lorenzo, quien mostró su intención de que "todo el municipio se podrá recorrer a pie o en bici y sin obstáculos".

Por otro lado, sigue sobre el tapete el proyecto de construcción de un gran centro comercial sobre una parcela de más de 500.000 metros cuadrados. Será sólo para que se implanten comercios, subrayó el alcalde, y "supondrá para el municipio y la comarca la creación de dos mil puestos de trabajo". Lorenzo reconoció que otros municipios cercanos tienen también proyectos de centros comerciales (caso de Almoradí, con quien Algorfa comenzó a redactar conjuntamente su plan general para después separarse), pero detalló que su equipo de gobierno tiene la construcción "firmada" con una empresa, en este caso Eroski. Aún así, las demoras que está sufriendo la tramitación del PGOU harán necesario actualizar ese convenio, porque se firmó con unos plazos definidos que ya no se van a alcanzar. e. g. b.