Joaquín Galant, el abogado de la madre condenada por quemar vivo con gasolina al hombre que en el año 1998 violó a su hija menor, Verónica Rodríguez, mientras éste se encontraba en un bar de Benejúzar, entregó ayer en la Ciudad de la Justicia de Elche 5.000 firmas para respaldar una solicitud de indulto que ahora debe tramitar el Ministerio de Justicia. Como se recordará, el hombre falleció al cabo de varios días por la gravedad de las quemaduras. Se da la circunstancia de que la familia del violador se ha trasladado a 400 metros de su casa en Benejúzar, lo que incumple una orden de alejamiento, según la hija de la condenada.

La sección séptima de la Audiencia Provincial, desplazada en Elche, condenó a una pena de 9 años y medio de prisión a María del Carmen García, como autora de un delito de asesinato en concurso ideal con un delito de lesiones con instrumento peligroso, aunque posteriormente quedó en una pena de ocho años y seis meses de prisión por el primer delito y otra pena de un año de prisión por el delito de lesiones dolosas.

No obstante, finalmente el Supremo rebajó cuatro años la pena al considerar la concurrencia de la eximente incompleta de trastorno mental transitorio, que implica imponer la pena inferior en dos grados por un delito de asesinato.

La intención de la defensa con esta petición de indulto presentada ayer es que la madre, que ya ha cumplido casi un año de prisión y que actualmente se encuentra en libertad, pero que su regreso a la cárcel puede ser cuestión de días (probablemente, ingrese mañana viernes), es que se suspenda la condena. Las firmas recogidas en las últimas semanas en distintas localidades de la Vega Baja acompañan al suplicatorio de indulto presentado ayer por la familia y que se basa, sobre todo, en el sufrimiento de la misma durante los últimos 13 años. "La violación, el sufrimiento de la niña, la conducta de la esposa e hijos del agresor Antonio Cosme que, en lugar de pedirles perdón por los hechos cometidos por su esposo y padre, sólo se preocuparon de propagar, a vecinos y familiares, que era una mentira de la niña, produciendo en el pueblo de Benejúzar una reacción de rechazo contra la menor y toda su familia, todas estas circunstancias originaron a María del Carmen García Espinosa, madre de la menor, una enfermedad incurable y a su esposo, hoy compareciente, un grave deterioro físico que impulsó/agravó, un cáncer en la garganta. Pero es que desde aquella ya lejana fecha, que quisiéramos olvidar, del 17 de octubre de 1998 hasta hoy 9 de febrero de 2011, la familia no ha dejado de sufrir, ha sido una desgracia tras otra", indica el letrado en su escrito quien fundamenta en distintas pruebas periciales su petición.

Galant recalca sobre todo, para solicitar el indulto, "la enfermedad mental incurable de María del Carmen García Espinosa como consecuencia de la violación de su hija, de 13 años, por Antonio Cosme en 1998, hace 13 años".

Raíz

Pero además insiste en sus alegaciones que el marido "está también enfermo de un cáncer de garganta, aparecido también a raíz de la violación de su hija. María del Carmen aunque padece trastorno adaptativo mixto y depresivo le cuida. Ambos se ayudan en sus incurables enfermedades (...) El quedar sólo en la casa y sin los cuidados o, la presencia, de María del Carmen tiene que tener efectos impredecibles", de ahí que se solicite esta petición de gracia ante el Ministerio de Justicia. La pretensión de la defensa de María del Carmen es que su inminente entrada en prisión se prorrogue al menos hasta que se estudie la petición de indulto.

"Estamos muy cansados de todo"

La joven Verónica Rodríguez aseguró ayer a este periódico que toda la situación por la que ha atravesado la familia les ha llevado "estar muy cansados de todo este procedimiento después de seis años, desde 2005. Estamos aburridos y desesperados porque no sabemos cuándo mi madre va a ingresar en prisión", aseguraba la joven.

A priori, la mujer deberá ser trasladada a Fontcalent, aunque aún no se sabe si será ingresada en la unidad de Psiquiatría. La muchacha añadió que "estamos contentos por la recogida de las 5.000 firmas en las que han colaborado todos los pueblos de la comarca de la Vega Baja". También insistió en que durante los últimos años se han contado mentiras sobre lo ocurrido por lo que no confían en nadie. D. P.