El exalcalde socialista de Bigastro Raúl Valerio Medina reconoció ayer que hasta el fin de su mandato utilizó dinero del Plan E (o Fondos FEIL) para gastos corrientes del Ayuntamiento y asumió las consecuencias, si las hay, a nivel contable, pero negó rotundamente que cometiera un delito de malversación de subvenciones y también que su gobierno sea el culpable de que ahora haya que devolver todos los fondos recibidos al Gobierno central.

Así se lo reprocharon el jueves la alcaldesa, Charo Bañuls (PP), y el portavoz del equipo de gobierno, Aurelio Murcia (UnPLC), que responsabilizaron a Valerio de haber dejado una deuda de casi 300.000 euros con los constructores de las obras subvencionadas con el Plan E y de que ahora el Ministerio de Política Territorial reclame al Ayuntamiento la totalidad de la subvención, casi 740.000 euros.

Medina, por su parte, aseguró ayer que cuando traspasó la Alcaldía a Bañuls el 11 de junio le entregó información detallada de cuánto quedaba por pagar a los contratistas y de los planes de pago que estaban firmados para que toda la deuda se saldara antes del 31 de diciembre. "La responsabilidad de perder los fondos del Plan E es del actual equipo de gobierno", dijo, porque "se ha saltado el principio de temporalidad que señala que hay que pagar antes la deuda más antigua" y se ha querido desentender de todas las facturas pendientes del pasado mandato, ello pese a que "todo el mundo sabe que hay empresas que sí están cobrando por trabajos hechos ahora". Por ello, consideró que "no es extraño que al Ayuntamiento le lluevan las reclamaciones de proveedores".

Medina añadió que el consistorio ha recibido en estos últimos meses 72.000 euros del Consell (destinados a Educación y que se han "desviado" a pagar las obras de un aparcamiento) y 300.000 de anticipos de SUMA que, en lugar de destinarse a estos pagos, se han ido en otras cuestiones. Por lo tanto, cuando llegue el 1 de enero y el Ayuntamiento deba 737.000 al Estado y conserve su deuda de 300.000 pendientes con los constructores las cuentas habrá que pedírselas al actual gobierno, valoró.

Casualidad

El exregidor se quejó ayer de la "casualidad" de que Bañuls y Murcia le reprocharan este asunto "a 48 horas de unas elecciones", cuando conocen las cifras desde hace medio año porque se las dio él mismo, de igual forma que les pasó el calendario de pagos que ahora han incumplido.Medina aseguró que actuó de buena fe cuando "desvío" los fondos del Plan E a otros pagos, convencido de que la ley le obliga por el principio de caja única a utilizar los fondos del Ayuntamiento, independientemente de a qué correspondan, a pagar primero las nóminas de los empleados y otros gastos preferentes (como impuestos).

Sospecha que paralizan informes que le exculpan

Medina aseguró ayer que el Ayuntamiento está paralizando el envío al Jugado de información le exculpa de una de las cinco causas abiertas tras la intervención policial de 2008 que se llevó a José Joaquín Moya (entonces alcalde) a la cárcel. Una de esas causas se refería a tres pagarés al portador firmados por Medina como tesorero, quien acudió a declarar poco después de las elecciones municipales y solicitó el archivo de la causa. El Juzgado le dice, cuenta Medina, que pidió en junio al Ayuntamiento la documentación que explica esos pagarés, sin que el consistorio haya respondido. Medina mostró un documento en el que la Guardia Civil dice haber visto esa documentación, por lo que el consistorio solo debe reenviar lo que ya mandó en 2009. Medina lamentó que al gobierno interese mantener al portavoz de la oposición bajo sospecha. e. g. b.