El concejal de Urbanismo, Paco Rodríguez, admitió que el Ayuntamiento ha podido causar un agravio comparativo al propietario de la primera gasolinera por haberle exigido unos trámites que ha tardado un lustro en obtener mientras que el segundo empresario los ha conseguido en tan sólo un año. El edil justificó el hecho de que a cada uno de los empresarios se le haya pedido una documentación distinta porque la interpretación del PGOU que hizo el técnico encargado de esta materia en 2005 no ha sido la misma que la efectuada por quien en este momento desempeña esas funciones. No obstante, añadió que "se le pidieron todos los documentos que en sí encierra el DIC, como los informes de calidad ambiental o los de carreteras, por lo que al final es lo mismo".
El edil retó al empresario que se considera afectado a acudir a los tribunales para exigir esos daños y perjuicios y concluyó que ambas mercantiles han pagado un canon similar por la obtención de los permisos pertinentes en base a la extensión de las parcelas y la superficie construida. Insistió en que se les ha tratado "en las mismas condiciones" y sin "ningún trato de favor".
