Los tres portavoces del equipo de gobierno de Orihuela mantuvieron ayer una reunión que acabó con un principio de acuerdo para mantener unido el tripartito. El entente, que tiene que ser confirmado hoy en una cita que ha convocado Guillén con todos sus concejales, supondría que el alcalde verde acepta el ultimatum de los socialistas, y que estos se quedan hasta final de la legislatura, haya o no haya sueldos, tal y como pretende el PP.

La solución que planteó hace diez días el PSOE y que le llegó incluso a presentar el pasado día 20 su dimisión ante el registro con fecha efectiva del día 29 incluye medidas que afectan a dos concejales de CLr, a su mayoral y a Pablo Vidal, así como a una remodelación del gabinete de comunicación. Si la portavoz socialista Antonia Moreno se sale con la suya hoy el alcalde le habría dado la razón de que él es el responsable del desgobierno en el equipo de gobierno, del que la socialista lleva días acusándolo.