Acciona, empresa concesionaria del servicio municipal de la limpieza y recogida de basura, cumplirá el contrato con el Ayuntamiento torrevejense hasta su finalización, a mediados del 2014, según explicaron ayer fuentes de la mercantil, que admitieron que las relaciones se han tensionado con el equipo de gobierno municipal del PP. La multinacional tampoco renunciará al cobro del último céntimo por los servicios prestados a pesar de que el Ayuntamiento considera que tiene que compensarles por servicios que no se han prestado.

La multinacional mantiene abiertos a día de hoy cuatro recursos contenciosos-administrativos contra el Ayuntamiento al que se podrían sumar más si continúan las discrepancias a la hora de abonar servicios prestados. Como se recordará, la administración local ha pagado menos que lo que la empresa cree se debe recibir por los mismos. El canon anual por el servicio que se realiza a diario, que incluye la limpieza de playas, supera los 13 millones de euros.

El Ayuntamiento adjudicó a Necso-La Generala la actual contrata en mayo de 2004, pese a contar con todos los informes técnicos y jurídicos municipales en contra, y permitió a la empresa, hasta el pasado agosto utilizar sin licencia unas instalaciones como planta de transferencia de basuras en la Finca Casa Grande, en la carretera de La Marquesa.

Pese a que durante décadas la mercantil fue la principal beneficiara de las adjudicaciones de obras públicas en el municipio, las relaciones entre ésta y el Ayuntamiento se han enrarecido, sobre todo, por esta clausura que obliga a la empresa a realizar un desembolso extra muy importante en medios materiales y recursos.

La citada adjudicación ha llevado al exalcalde de la ciudad, Pedro Ángel Hernández Mateo, al banquillo por supuesta prevaricación, mientras que por el uso de la planta de transferencia de basuras se encuentra imputado el concejal de Urbanismo. El juicio comienza la semana próxima.