Orihuela estrenó ayer las nuevas instalaciones del centro ocupacional Oriol, al que acuden personas con discapacidad psíquica, y que incluye también una residencia para la atención de algunos usuarios que carecen de otro hogar. Bienestar Social ha hecho un esfuerzo para incluir ambos servicios en unas únicas instalaciones y prevé ampliar el número de plazas el próximo año.