Un macrovaradero en el Muelle de Poniente. Esa es una de las iniciativas que esconde el plan de ordenación del Puerto de Torrevieja aunque no se expresa con claridad en la propuesta de reordenación que públicamente ha sido dada a conocer por el Ayuntamiento y la Generalitat. El alcalde Eduardo Dolón (PP) anunció en la presentación de esa propuesta que los pescadores, que son apartados de su ubicación central en el puerto, podrían reubicarse junto a Marina Salinas. Algo que causó cierta sorpresa puesto que la explanada de 4.500 metros cuadrados y el muelle de abrigo para esa reubicación está concluida en 2008 en el dique de Poniente. ¿Por qué? La administración autonómica ya tiene otros planes para «vender» esta infraestructura a la inversión privada.
La propuesta que todavía no deja de ser un proyecto -confirmada y vista con buenos ojos tanto por los responsables de la Cofradía de Pescadores como por las tres marinas deportivas-, pretende que las instalaciones que se construyeron en el Muelle de Poniente para realojar a la flota pesquera y la nueva lonja se utilicen finalmente para levantar este macrovaradero, a adjudicar por la Generalitat, que tiene la competencia del Puerto, por concesión del dominio público a una empresa inversora.
Los pescadores, a la espera de que se hiciera la nueva lonja en esa ubicación, rechazaron de plano las instalaciones ya realizadas que se construyeron para realojarlos de las que, dicen los patrones «en la zona de abrigo no puede dar la vuelta ni un solo barco». Por otra parte consideran que la construcción de un varadero de grandes dimensiones evitaría los constantes traslados que realizan los patrones para labores de mantenimiento a los varaderos de Cartagena y Denia. El presidente de la Cofradía , Pedro Carmona, asegura que la lonja y la fábrica de hielo «sí caben» a continuación de Marina Salinas, una zona en la que este verano se ha instalado, previa concesión, un cable sky náutico. Carmona apunta que la que sería la infraestructura más importante para los pescadores, el muelle de abrigo y atraque, está realizado: el propio dique de Levante y el muelle de abrigo de Marina Salinas -que cuenta con 425 metros- como zona de atraque de los más de 20 barcos de cerco que puede llegar a albergar la actividad pesquera en Torrevieja.
Una fuente autorizada del puerto deportivo Marina Salinas consultada por INFORMACIÓN indicó por su parte que han tenido noticias del proyecto, aunque sin definir, y que el sector náutico lo apoyaría. La dársena de Torrevieja cuenta con tres marinas deportivas que suman más de 2.000 puntos de amarre -la oferta más elevada de la Comunidad Valenciana-. En el caso de Marina Salinas existe una zona especializada en veleros de grandes dimensiones que en estos momentos no encuentran servicio de varadero adecuado. La iniciativa también beneficiaría a otros puertos como el de Santa Pola y Alicante y a las marinas deportivas situadas entre la Manga del Mar Menor y Alicante que podrían contar con un varadero para dar servicio a la numerosa flota recreativa y pesquera del sureste español.
El cuento
No todo el mundo está de acuerdo con la propuesta. Algunos pescadores consideran que la dársena pesquera ya no da para más instalaciones. Fuentes empresariales se preguntan además por qué el alcalde anticipó el cambio de ubicación de la flota sin desvelar el uso que se le quiere dar a las que se construyeron para ese fin. Y apostillan: «Es el cuento de la lechera. Alguien vende un proyecto para el que no hay inversor para que se beneficien todos los implicados», indican las mismas fuentes.
