La réplica del pailebote Pascual Flores ha recuperado la arboladura que había perdido por falta de mantenimiento mientras permanecía atracado en los últimos años como museo flotante en el muelle pesquero de Torrevieja. La previsión municipal es que recale en aguas de Torrevieja a finales junio para emprender distintas escalas en el marco de la programación prevista por la Fundación Nao Victoria, que es la que está poniendo a punto la nave y que está especializada en la puesta en valor de réplicas de barcos históricos. El alcalde de Torrevieja, Eduardo Dolón y el concejal de Cultura, José Antonio Quesada visitaron el martes en Huelva las obras de reforma del pailebote. La Fundación Nao Victoria recibirá 750.000 euros en un periodo de cinco años -cuatro más uno prorrogable- a cambio de estos trabajos y del uso como «embajador» de la historia marinera y salinera de la ciudad en sus escalas nacionales e internacional. El barco actual es una réplica del original y costó cuatro millones de euros. Quiere ser símbolo del patrimonio marítimo de la ciudad y «se está restaurando -una restauración de una restauración previa- para su perfecta navegación y convertirse en embajador itinerante para la promoción turística y cultural de la ciudad, a través de distintas giras que realizará por distintos puertos nacionales e internacionales», según el alcalde.
Los trabajos de restauración y puesta a punto comenzaron el pasado mes de noviembre de 2020, cuando se sacó el barco del agua en los astilleros de Punta Umbría (Huelva), y en ellos intervienen más de 25 personas entre carpinteros, calafates, soldadores, herreros, ingenieros y servicios auxiliares para dejarlo en perfecto estado. Desde entonces, se han repasado sus piezas de madera, restaurado los accesos y las cabinas, se han cambiado las tablas del forro y la cubierta, y calafateado y pintado el casco. El 14 de abril el barco fue botado y trasladado a Huelva, donde se le han colocado palos nuevos y en estos días se trabaja para su completar su aparejo, jarcias y arboladura. Se le ha instalado una hélice de proa, y se le va a dotar de nuevos equipamientos para navegación internacional.
Una vez terminados los trabajos, está previsto que el próximo mes de junio el navío ya cuente con todos los certificados y pueda iniciar su gira promocional por distintos puertos del Mediterráneo, con una escala especial en Torrevieja, a finales de junio. Contará con contenido expositivo y podrá ser visitado por el público y escolares de todas las ciudades en los que haga escala, con un programa de actividades diseñado con el Instituto Municipal de Cultura. Tras pasar varios días en Torrevieja, el pailebote se trasladará, realizando varias escalas por diferentes puertos europeos, al Festival Marítimo de Bremerhaven (Alemania), que se celebrará del 11 al 15 de agosto, por lo que será la primera vez que el navío torrevejense participe en un festival internacional marítimo -y que navegue en dos décadas-.
Un interminable y costoso proyecto que se remonta a 1999
La que se está llevando a cabo en Punta Umbría es una rehabilitación de la réplica del Pascual Flores que ya costó 4 millones de euros (según el inventario de bienes municipales) y se terminó sobre 2008. En 1999 el Ayuntamiento adquirió el barco original por 200.000 euros -nave que terminó desguazada en un vertedero-. Sobre ese modelo se hizo el actual que navegará este verano -22 años después del inicio del proyecto-.
