El Ayuntamiento ha sacado a licitación las obras de rehabilitación de la antigua Caja de Ahorros de Nuestra Señora de Monserrate. El edificio, un palacio abarrocado y de una gran calidad arquitectónica, en pleno casco histórico -junto a la Biblioteca Fernando de Loazes-, es la sede del centro cultural Miguel Hernández: "Presenta un deterioro acelerado al que hay que poner fin mediante la restauración de los elementos arquitectónicos con valor cultural y la conservación de los espacios, abriéndolo al uso público como elemento potenciador de los itinerarios culturales y turísticos del casco histórico de Orihuela", recoge el proyecto de actuación.
Los primeros pasos para su mejora se dieron en 2019. Incluso, en octubre de 2020 la corporación municipal recibió la autorización por parte de la Conselleria de Cultura para su rehabilitación, por lo que se preveía en las próximas semanas la licitación de las obras. Pero todo se paralizó.
Finalmente, es ahora cuando se produce con un presupuesto de 3,5 millones de euros y un plazo de ejecución de 14 meses. En cuanto a su uso, el alcalde Emilio Bascuñana ha explicado que dispondrá de espacios polivalentes dedicados a la docencia, las industrias creativas y la vida asociativa. En concreto, el proyecto describe cuatro ejes: formación en torno al turismo, el patrimonio, la cultura y el ocio, lo que requiere de espacios abiertos de trabajo en equipo; un vivero de empresas innovadoras para apoyar a emprendedores, con salas flexibles y oficinas; laboratorios destinados a la fabricación física y digital de productos asociados a las industrias creativas, y espacios de encuentro y trabajo colaborativo que permitan la celebración de actos y otras actividades para dar cabida a la participación ciudadana. Las empresas podrán presentar sus ofertas hasta el 21 de marzo.
Solo un día antes también salían a licitación las obras de rehabilitación del Palacio de Rubalcava, con una inversión de 3,8 millones euros. En este caso, albergará salas de museo y multifuncionales, así como una escuela de hostelería, con un restaurante y cafetería. Bascuñana ha manifestado que todo ello es la "guinda" a un trabajo que ya comenzó en el mandato, pero sobre todo "contribuye a recuperar la actividad del casco histórico", con la idea de "disfrutar de este entorno especial y único".
Todo ello, ha subrayado el alcalde, "contribuye a recuperar la actividad del casco histórico", con la idea de "disfrutar de este entorno especial y único".
Ambas actuaciones se enmarcan en la estrategia EDUSI, que está cofinanciada al 50% por fondos europeos. En este punto el regidor agradeció el apoyo del PSOE, que en julio votó a favor de una propuesta de los populares, que obtuvo el rechazo de su socio de gobierno (Ciudadanos), para incorporar un montante del superávit de los presupuestos para este fin.
Bascuñana también ha recordado que tanto en el mandato anterior como en este se está realizando "una gran apuesta por la recuperación del patrimonio como nunca antes se había hecho". En este sentido, ha detallado otras actuaciones que la Concejalía de Patrimonio Histórico tiene previstas o está llevando a cabo: los antiguos juzgados, el Palacio Marqués de Arneva (sede del Ayuntamiento), el Museo Arqueológico, acceso al Castillo, Casa de los Mineros y su entorno, las Norias Gemelas, el yacimiento de Los Saladares, Pozos de Cremós, Baños de San Antón y Torre de Embergoñes, entre otros.
El PP ha invitado a los portavoces de los demás grupos a la presentación de las licitaciones de las obras que se acometerán en el Palacio de Rubalcava y en la antigua Caja de Ahorros Virgen de Monserrate, pero no han acudido. El PSOE ha valorado el anuncio: "Nos alegramos de que por fin las actuaciones que han de evitar que estos edificios acaben cayéndose estén más cerca de comenzar, pero nos preocupa esta premura cuando realmente ahora se abre la fase en la que más está fallando el Consistorio, como es la gestión", ha explicado su portavoz, Carolina Gracia, que prefiere "no hablar de primeras piedras" y estar alerta de los desencuentros y luchas internas en el gobierno local (PP y Ciudadanos). A su juicio, "la bronca y desidia" podría "hacer peligrar la licitación y posterior adjudicación". Como ejemplo ha citado la licitación de las obras de los antiguos juzgados, que salió a finales de 2021 y que aún siguen sin adjudicarse. "Al final la tardanza en estos procesos hace que se tenga que volver a comenzar y genera perjuicios a la administración", ha añadido. También ha recordado que estas tres licitaciones se han logado gracias al apoyo del PSOE, que en julio votó a favor de una propuesta de los populares para incorporar un montante del superávit de los presupuestos para este fin.
