Ha fallecido Manolo Lorente Belmonte, quien fuera concejal, teniente alcalde y diputado autonómico del Partido Popular de Orihuela. Durante varias décadas ha estado ligado al día a día de la política oriolana y a los avatares de sus distintos gobiernos municipales. Un testigo que recogió su hija Mónica, alcaldesa de Orihuela entre 2007 y 2011.

Concejal con solo 21 años, Lorente lideró durante los años de transición y primeros ochenta el proceso de fusión de las distintas corrientes centristas y de la derecha en la conformación de Alianza Popular en la Vega Baja, antecesora del PP. Un logro en buena medida posible gracias al carácter abierto e integrador de Lorente y a una forma de entender la política donde primaba la relación personal y directa como forma de allanar diferencias.

De calle

Ejemplo de político "de calle", participó activamente de las inquietudes de los vecinos del extenso municipio oriolano, desde el litoral hasta las pedanías del interior, atendiendo demandas como la creación de la sede del Ayuntamiento en Playa Flamenca, realización efectuada bajo los mandatos de Luis Fernando Cartagena. Y con especial atención se dedicó a hacer valer los intereses de unas pedanías que en muchas ocasiones quedaban muy lejos de la "esquina del Pavo".

Histórico del Partido Popular, su voz constituía en muchas ocasiones ese verso suelto con un punto anárquico dentro de la formación conservadora. Su concepto de la práctica política y de lo que debía ser el servicio público pasaba por la lucha voto a voto y cuerpo a cuerpo en la que se ganaba para luego mandar.

Carpe Diem

Lorente ejercía de político dedicándole a esta actividad las 24 horas del día... y de la noche. No en vano reconocía como uno de sus premios más queridos el "Carpe Diem" con el que fue distinguido por empresarios e informadores locales, que también lo reconocieron en varias ocasiones con el premio Naranja por su buena relación con los medios.

Para la historia local quedan sus recordadas tertulias en el Horus, el Arlequín, el BOE o el Chanos de Molins, donde disfrutaba y hacía disfrutar a sus amigos, entre ellos el alcalde socialista de Bigastro José Joaquín Moya, aprovechando hasta el último minuto de la noche. Saber dónde empezaba el concejal y terminaba Manuel Lorente era difícil también para su familia.

Fue además durante muchos años director del Instituto de Enseñanza Secundaria del Palmeral de Orihuela y un convencido defensor de la Formación Profesional en la comarca como destacaba su hija, Mónica Lorente, quien recordaba además la intensidad con la que se entregaba en cualquier ámbito de su vida.

 El sepelio tendrá lugar mañana viernes a las 12 en la iglesia de las Santas Justa y Rufina de Orihuela.