El presidente de la Generalitat, Ximo Puig ha asegurado este miércoles que el aumento del caudal ecológico del Tajo validado con la aprobación del nuevo plan de cuenca de este río forma parte del cumplimiento de una sentencia judicial. Y ha responsabilizado a Madrid del estado ambiental del Tajo, de su contaminación. Y ha reclamado que Madrid se haga responsable de las obras que debe acometer para depurar las aguas residuales, que están contempladas en ese plan. Uno de los factores que obliga a elevar el caudal ecológico del río a 7 metros por segundo desde el próximo mes de enero a la altura de Aranjuez-el mínimo que debe circular- es la calidad de sus aguas. A más contaminación, más agua será necesaria como caudal ecológico. La mayor parte de las competencias en depuración de aguas residuales está en manos de las administraciones autonómicas en España.

Estas declaraciones las ha realizado Puig en una visita a Torrevieja después de que el presidente del Partido Popular de la Comunidad, Carlos Mazón, cuestionara con dureza la abstención del representante de la Generalitat en la aprobación del plan de cuenca que se llevó a cabo en el Consejo Nacional del Agua. Una abstención que los populares interpretan como un silencio cómplice al recorte trasvase que el PP y empresarios agrícolas aseguran que supone ese nuevo plan de Cuenca, que dispone que en vez de los seis actuales, se eleve en 2026 a 8 metros cúbicos por segundo y en 2027 a 8,5.

Sin autoengañarse

Para Puig "lo que hay que explicar es dónde estábamos y dónde estamos ahora. Hay una sentencia judicial que obliga a cumplir un caudal (ecológico) determinado para el Tajo. Y no podemos engañarnos. Ni autoegañarnos, ni engañar a nadie. Nosotros estamos intentando la única vía que yo entiendo: el diálogo y el trabajar para un acuerdo".

"Hemos trabajado de la mano de los regantes y hemos buscado una solución lo más razonable posible", ha agregado Puig en relación una disposición adicional en ese plan de cuenca que limita el aumento de los caudales ecológicos previstos en los próximos años -que son los que rebajan la disponibilidad de recursos para el trasvase-. Sin embargo, como recogió este diario ahora se ha conocido que ese pacto expresado en la disposición adicional no es vinculante.

Caudales

En este sentido Puig ha indicado que "desde la perspectiva de lo que ayer finalmente se aprobó claramente se ve que va a producir una evaluación (de los caudales)". Y añadió que "si realmente se cumplen las inversiones que están previstas (en depuración) creo que no hará falta ir más allá. La gran inversión que hace falta y en la que hay que poner el foco es en el problema sustancial derivado de la no regeneración (depuración) de aguas (residuales) que debe hacer Madrid", ha indicado.

Calidad del agua

"Si conseguimos que sean depuradas mejorará la calidad del agua del Tajo. Y que todo el conjunto de obras que están asociadas al Plan del Tajo se hagan", ha subrayado el jefe del Consell. "Y que consigamos tener agua para siempre que es el gran objetivo sumando todos los recursos disponibles. Tenemos que mejorar nosotros también en la reutilización de nuestras aguas, aprovechar la desalinización, con un unos precios que sean adecuados y asumibles. Nadie está más interesado que nosotros en que el Tajo sea un río vivo".