Los empresarios del polígono de Guardamar reclaman en el juzgado la retirada del mercadillo del suelo industrial

La Asociación de Empresarios del Polígono Santa Ana de Guardamar del Segura ha presentado un recurso contencioso administrativo en el que reclama que se anule la decisión del Ayuntamiento de reubicar el mercadillo semanal del municipio que ocupa el aparcamiento La Redonda y las avenidas Espardenyers y Pastissers del propio polígono. 

Suelo industrial

Fuentes del colectivo, que representa en torno a 40 empresas, señalan que la legislación impide la actual actividad porque 67.567 metros cuadrados del polígono están calificados como industriales en el Plan General de Ordenación Urbana. Y apenas mil trescientos aparecen como compatibles para usos terciarios como el de la venta ambulante.

La demanda indica que el decreto 65/2012, de 20 de abril, del Consell, por el que se regula la venta no sedentaria en la Comunidad Valenciana impide que los mercadillos puedan ubicarse en la que los suelos industriales son dominantes. Es el principal argumento de la acción judicial para que se declare nulo el acto administrativo que avaló el cambio, que es el objetivo de la asociación.  

Problemas 52 días al año

Los empresarios sostienen que la actividad de los comerciantes condiciona mucho la que realizan las empresas afincadas. El mercadillo se instala 52 días -todos los miércoles del año-. Impide el acceso de vehículos y camiones en algunas zonas.

Según las mismas fuentes empresariales se reclamó oficialmente y por el cauce administrativo formal toda la documentación generada por el Ayuntamiento de Guardamar en el expediente tramitar cuando se decidió el cambio, antes de que se hiciera efectivo, en plena pandemia, y la respuesta, siempre según las mismas fuentes, fue el silencio administrativo.

Es el juzgado el que ha reclamado ahora esa documentación al Ayuntamiento, que está agotando el plazo que le ha dado el órgano judicial sin atender el requerimiento, según las mismas fuentes.

Cambio en la ordenanza

El alcalde José Luis Sáez (PSOE) no comparte la valoración de los empresarios. Asegura que cuando se propuso el cambio, a finales del año 2020, estuvieron de acuerdo. Y que se consideró además que la afluencia de compradores iba a ser un revulsivo para un polígono que pese a esa calificación de industrial de las parcelas presenta, según Sáez, una mayoría de actividades terciarias del sector servicios.

Al contrario de lo que sostienen los empresarios, Sáez asegura que facilitó a los representantes de los empresarios todos los informes de los técnicos que avalaron la decisión. Y recordó que la ordenanza de la venta no sedentaria acaba de modificarse en el pleno del Ayuntamiento, recogiendo las alegaciones de distintos colectivos, y ya consolida la ubicación en el polígono como definitiva.

Las mismas fuentes municipales indicaron que se adaptaron los accesos para que quedaran libres las entradas a dos de las naves más afectadas por la ocupación de la vía pública. Además se puso en marcha un ascensor que conecta la zona en la que se ubica el mercadillo con el casco urbano.

Con polémica

El traslado del mercadillo se realizó en plena pandemia. A finales de 2020. Y permitió, de paso, sacarlo del centro del casco urbano. Algo que pedían los vecinos residentes del centro, aunque había opiniones encontradas sobre la oportunidad de dejar a esa zona del municipio sin la actividad que generaba el mercadillo. Inicialmente, se escogió una parcela provisional muy pequeña lo que provocó la protesta de los comerciantes ambulantes, y también las críticas del Partido Popula en la oposición. Finalmente se adoptó la zona del polígono por superficie disponible y accesos.