El Ayuntamiento de Torrevieja recaudará 5 millones por el impuesto de construcciones en 2024 y espera recibir otros 22 de transferencias del Estado

El equipo de gobierno del Partido Popular (PP) ultima las grandes cifras del que será el presupuesto municipal de 2024. La administración local funciona con los presupuestos prorrogados de 2021 y tiene previsto el viernes aprobar la cuenta general de 2022 en un pleno extraordinario. En el capítulo de ingresos las transferencias corrientes -las que recibe un Ayuntamiento de otras administraciones, en especial del Estado- van a experimentar un incremento estimado de 3,5 millones de euros hasta superar los 22 millones de euros. Con lo que se convierte en la segunda partida por relevancia en ingresos por encima del impuesto de Plusvalía, que grava la transmisión de inmuebles, que se estabiliza en torno a 15 millones.

El concepto fundamental del presupuesto de ingresos del Ayuntamiento en las últimas décadas sigue siendo la recaudación por el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) que se mantiene en torno a los 35 millones de euros anuales.

Incertidumbre

Los ingresos por parte del Estado aumentan en 3,5 millones de euros con respecto a lo presupuestado en 2022, cifra que se fijó 18,3 millones de euros. Es solo una estimación elaborada en función de las cuentas de 2021 y de lo ingresado por el Estado durante este 2023 ya que, reconoce el concejal de Hacienda y Contratación Domingo Paredes, «debido a la incertidumbre política, a día de hoy no ha llegado la notificación con los ingresos previstos por parte del Estado para 2024, por lo que la previsión se está haciendo con lo ingresado en 2023». Paredes valora que «si bien las arcas municipales se ven beneficiadas por esta subida de ingresos del Estado, el incremento de la recaudación a nivel estatal debido a la inflación es desmedido y está siendo soportado por todas las familias de clase media». Según cálculos del gobierno central se recaudarán casi 12.000 millones de euros por el alza de los precios. La transferencia corriente a los ayuntamientos aumenta, pero no en la medida que aumenta la recaudación, en opinión del edil.

Si bien las arcas municipales se ven beneficiadas por esta subida de ingresos del Estado, el incremento de la recaudación debido a la inflación es desmedido y está siendo soportado por todas las familias de clase media

Domingo Paredes

— Concejal de Hacienda y Contratación del Ayuntamiento de Torrevieja

No en la misma medida

«Esto se refleja en el aumento de la partida de ingresos por IRPF, IVA o hidrocarburos por la que todos los ciudadanos a día de hoy están pagando más por lo que antes pagaban mucho menos. De estos impuestos, el Estado cede a los ayuntamientos únicamente el 2% imputable al municipio».

A juicio del concejal estos impuestos (IRPF e IVA) se deberían rebajar por parte del Estado para compensar la subida de precios y «no perjudicar a los ciudadanos» y, por otro lado se debería modificar la Ley de Haciendas Locales para compensar a los ayuntamientos turísticos -como es el caso de Torrevieja- a través del IVA los gastos de servicios que presta el Ayuntamiento a la población flotante que no se encuentra empadronada en el municipio y que alcanza las 500.000 en los principales meses de verano. El concejal subraya en este sentido que a pesar de la subida de ingresos por parte del Estado «estamos lejos de la compensación que Torrevieja se merece».

Instalaciones y Construcciones

Por otro lado, en cuanto al Impuesto de Construcciones e Instalaciones (ICIO) en el último presupuesto se planificó una recaudación de 1,6 millones de euros. Para confeccionar las cuentas del ejercicio 2024 se ha hecho una media de los ingresos obtenidos en concepto de ICIO en 2022 y 2023 más los ingresos que se obtendrán de la construcción del Área de Reparto 81 -los dos rascacielos de Baraka en Doña Sinforosa-, y del Sector 20 «La Hoya»- donde están previstas 7.490 viviendas- recogiendo una previsión de ingresos de casi 5 millones de euros.

Según Paredes ese ingreso se traduce en gasto corriente en servicios además de «ayudas para los ciudadanos y, a su vez, creación de empleos directos en la ciudad». En el capítulo de gasto los ayuntamientos empiezan a dar por hecho que la suspensión de las reglas de gasto, vigentes desde la pandemia en marzo de 2020 y prorrogada por la crisis energética y la guerra de Ucrania, ya no estará vigente en 2024.

Eso implica que los remanentes de tesorería -el superávit- no va a poder emplearse para gasto corriente e inversiones. De ahí que muchos ayuntamientos van a intentar elevar los presupuestos de gastos a su nivel de ejecución del presupuesto corriente más los remanentes que de forma efectiva han podido utilizar durante el ejercicio.

Tasas

Esa tendencia también implica a los ingresos. El Ayuntamiento reactivará la ordenanza fiscal por ocupación de la vía pública, tal y como ya ha anunciado oficialmente el área de Hacienda. El pago por el espacio público de las terrazas, mercadillos y kioscos supone para las arcas municipales más de dos millones de euros, que ha dejado de recaudar desde 2020. Durante la pandemia se suspendió la ordenanza para respaldar al sector de la hostelería. La tasa vuelve en 2024, también para cuadrar la cuentas.