El alcantarillado de El Campello sigue haciendo aguas, a la espera de que la Generalitat licite la obra para conectar la zona norte con la depuradora de Sant Joan. Una nueva avería ha provocado un vertido de aguas fecales de dos semanas al río Seco-Montnegre, según han denunciado los vecinos y han confirmado en el Ayuntamiento de El Campello. Y por este motivo se ha cerrado la playa de la Punta del Riu, incluida la zona canina, hasta verificar la calidad de las aguas.

El problema se registró en la estación de bombeo del Gallo Rojo, en la playa del Carrer La Mar, a mediados de mayo. Se trata de una infraestructura de saneamiento que recibe, además de las aguas negras de toda esta área turística, las de parte de la zona norte: Coveta Fumà, Amerador, Alkabir y l’Almadrava. Y una avería tras un fuerte episodio de lluvias dejó fuera de servicio el sistema eléctrico, que ha tardado dos semanas en recuperar el 100% del servicio este pasado viernes.

Esta estación de bombeo, ubicada junto al Monumento al Pescador, tiene un aliviadero de emergencia, para que en el caso de una avería tirar las aguas al río Seco. Una salida de urgencia por la que han estado saliendo fecales durante dos semanas, según han denunciado desde la Plataforma Río Seco, que forman las comunidades de propietarios de Cala Real, Cabo Azul, Cabo Verde y Cabo Mar, y que suman unas 600 viviendas. Alertan de malos olores por este vertido, con aguas muy sucias que han llegado a la playa de la Punta del Riu, contaminando el arenal. Además, el estancamiento de estas aguas también denuncian que está provocando la proliferación de mosquitos, junto con el propio caudal que trae el río procedente de la depuradora de Sant Joan. Y Compromís también ha denunciado esta situación.

Suciedad en la playa de la Punta del Riu que los vecinos vinculan a los vertidos

Según fuentes vecinales, esta semana ha estado en la zona el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil, que iba a dar traslado de esta situación a Costas y a la CHJ. Unos vertidos al río Seco que han sido denunciados en otras ocasiones también por los vecinos.

El pasado jueves aún seguía el olor a fecales en la zona. El edil de Servicios, Julio Oca (Cs), ha explicado que la avería ha tardado dos semanas el resolverse por completo, recuperando en un principio la plena normalidad este mismo viernes, al funcionar ya todas las bombas de la instalación. 

El concejal también ha lamentado la falta de presupuesto para hacer frente a necesidades tan básicas como el saneamiento. «El panorama es desolador. Hay una carencia de partida presupuestaria para el mantenimiento, no solo de la red de saneamiento, sino también de los ascensores -El Campello tiene seis de ellos fuera de servicio en edificios municipales al requerir de reparaciones-, Intervención bloquea contratos... Es necesario ajustar las partidas a las necesidades reales, de cosas tan básicas como el saneamiento, y no al revés, hay tanto dinero y con eso te apañas». El Campello mantiene prorrogados los presupuestos de 2020, sin que al parecer se haya avanzado en los últimos meses con las cuentas para este año.

El concejal también ha lamentado que este bloqueo del Ayuntamiento, en parte por la polémica por los contratos menores y el riesgo de fraccionamiento, está haciendo que lleven dos meses con el camión municipal de saneamiento sin reparar, por lo que solo puede succionar pero no desatascar. Del mismo modo, Oca ha señalado que la empresa que se ocupa desde hace dos meses del mantenimiento de la red de saneamiento va a instalar un filtro en la estación de bombeo del Gallo Rojo para tratar de reducir los problemas que sufre, ya que además llegan allí muchas toallitas y otros restos para lo que no está preparada. Y con esta reparación se han gastado en dos meses buena parte del presupuesto para todo el año. Así mismo, Oca ha explicado que por protocolo de Playas se ha cerrado al baño la Punta del Riu tras este vertido, hasta que las analíticas no confirmen la buena calidad de sus aguas.

Compromís denuncia la falta de información

Por su parte desde Compromís su portavoz, Benjamí Soler, ha manifestado que "hace más de dos semanas que el aliviadero de saneamiento de la calle San Bartolomé no cesa de verter aguas fecales a la desembocadura del rio Montnegre. Y desde el equipo de gobierno no se ha informado nada al respecto, todo lo contrario, se ha informado que las molestias por los malos olores provenían de la falta de limpieza de los imbornales de pluviales. Por lo que hemos podido deducir, viendo los trabajos que llevan días realizándose en la estación de bombeo del Monumento al Pescador, todo hace indicar que el bombeo está colapsado. Pero bueno, todo son suposiciones, porque el gobierno ni dice, ni hace. Estamos a las puertas del verano, con las fuentes secas, las aceras sucias, el almacén municipal sin material, personal municipal solicitando traslados, otros ya se fueron, el camión de saneamiento por arreglar, las calles con boquetes llenos de arena y ahora la desembocadura del río vertiendo fecales al mar. Eso sí la foto de las banderas azules no puede faltar".

Soler ha agregado que "lo peor de todo esto no son las deficiencias que nos muestra el presente, lo peor es la incapacidad de gestión de un equipo de gobierno agonizante que todo le viene grande.”

Obra de la Generalitat

Con la obra que tramita la Generalitat, valorada en caso 5 millones y que se espera que pueda iniciarse en los próximos meses, esta estación de bombeo dejará de recibir las aguas fecales de parte de la zona norte, que irán directamente a la estación que hay en el IES Enric Valor, lo que reducirá la carga que sufre la zona del Carrer La Mar, sobre todo en verano o cuando hay fuertes lluvias. El proyecto de la Generalitat busca así solucionar este tema, así como los graves problemas de vertidos que sufre la zona norte, donde son frecuentes las fugas en calas como las de Lanuza, Baeza -cerrada al baño por este motivo desde 2020-, l’Almadrava o Palmeretes, debido a la obsoleta red de pequeñas depuradoras, que sobre todo en verano se ver desbordadas por el aumento de la carga por los turistas.