El alcalde Alcoy, Toni Francés, ha situado al edil Jordi Martínez como nuevo hombre fuerte del gobierno municipal al nombrarlo primer teniente de alcalde, en sustitución de Lorena Zamorano, que a partir de ahora queda relegada a la segunda tenencia de alcaldía. Martínez asume de ella el área de Urbanismo, que se suma a las competencias que ya ostentaba: Obras y Servicios, Movilidad Sostenible, Accesibilidad Universal y Políticas Comarcales. Zamorano, no obstante, mantendrá el resto de delegaciones que tenía asignadas, Turismo, Patrimonio Histórico y Contratación.
El nuevo número dos del equipo de gobierno alcoyano tendrá además la denominación específica de vicealcalde, que no se utilizaba de manera habitual en este Ayuntamiento desde el mandato 2011-2015. Entonces tuvo esa responsabilidad el que a la sazón era portavoz del Bloc-Compromís, Rafel Carbonell, dentro de la coalición de gobierno que formaron con el PSOE y EU-L’Entesa, hasta que Francés los expulsó apenas año y medio después tras una serie de desavenencias.
La designación de Martínez como vicealcalde y concejal de Urbanismo fueron los principales cambios en el equipo de gobierno de Alcoy anunciados ayer por el alcalde. Francés ha tenido que afrontar la remodelación del organigrama tras la renuncia por jubilación del edil Miguel Juan Reig, anunciada la semana pasada, y la incorporación de Zamorano como secretaria del Ayuntamiento de Muro. La redistribución de competencias era esperada desde hacía días y en las quinielas para ver quién asumía la gestión del urbanismo el nuevo vicealcalde aparecía bien situado, ante la relevancia y la proyección pública de sus funciones y de algunos proyectos en particular, como el plan de peatonalización y otras obras de renovación en diferentes calles del centro histórico.
Por su parte, las áreas que gestionaba Miguel Juan Reig, Deportes y Salud Pública, se reparten de forma respectiva entre los concejales Alberto Belda y Teresa Sanjuán. El primero, además, mantiene las competencias en Empleo pero pierde las de Educación, que son asumidas por Jordi Silvestre, quien las sumará a las de Transición Ecológica y Protección Civil que ya gestionaba, y que además será quinto teniente de alcalde. Asimismo, Belda continuará siendo cuarto teniente de alcalde, mientras que la concejal de Régimen Jurídico, Hacienda y Comercio, Vanessa Moltó, también mantendrá la tercera tenencia de alcaldía, al igual que las delegaciones que ya tenía asignadas.
Otro cambio destacado en el gobierno municipal es que se crea una nueva concejalía para Jordi Segura, quien, como ya publicó este periódico, será el sustituto de Reig en la corporación y tomará posesión como edil a lo largo del mes de junio. El profesor del campus de Alcoy de la Universitat Politècnica de València asumirá las competencias de Innovación, Industria y Actividades Empresariales y Sociedad Digital. El alcalde, que compareció públicamente acompañado de todos los componentes del equipo de gobierno, incluidos el aún no estrenado Segura y el dimisionario Reig, defendió la puesta en marcha de esta área de gestión municipal, dado que, según ha afirmado, será una forma de «potenciar aún más las políticas industriales» y que el Ayuntamiento asuma «el reto de la sociedad digital».
Según Francés, el ecuador del mandato es «buen momento para redistribuir funciones y encarar los próximos dos años», en los que la ciudad debe «afrontar retos importantes», como la ejecución de los proyectos previstos a través de fondos europeos. A su juicio, «tenemos el equipo necesario para sacarlos adelante con éxito».
A la espera de la toma de posesión de Jordi Segura
Los cambios anunciados el viernes por Toni Francés se harán efectivos una vez que Jordi Segura tome posesión como concejal, algo que aún tardará algunos días puesto que primero debe formalizarse incluso la renuncia de Miguel Juan Reig. Se prevé, en cualquier caso, que todo el trámite quede cumplido en las primeras semanas de junio. El nuevo edil, por otro lado, tendrá dedicación exclusiva, según indicó el alcalde, pero tampoco será de inmediato, puesto que en primera instancia finalizará sus responsabilidades académicas de este curso en el campus de Alcoy de la Universitat Politècnica de València.
El PP critica la demora de unos cambios «mínimos»
Compromís afirma que el PSOE está «agotado y sin proyecto» y tacha de «juego de trileros» la remodelación
El grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Alcoy ironizó con que «por fin, un mes después de anunciarlo», el alcalde ha remodelado el gobierno local. El portavoz Quique Ruiz lamentó «la parálisis de un gobierno en clara desbandada, en el que unos concejales se jubilan y otros se marchan a trabajar a otros municipios», en alusión a Miguel Juan Reig y Lorena Zamorano, y afirmó que un equipo «que tiene por objetivo trabajar por Alcoy no puede permitirse el lujo de permanecer en una situación de provisionalidad». El edil denunció la «falta de planificación» del alcalde y que, al cabo de varias semanas, los cambios realizados hayan sido «mínimos». En todo caso, a su juicio destaca «la concentración de poder municipal en la figura de Jordi Martínez», de lo que dijo que supone «un premio al conflicto y al enfrentamiento» en las diferentes áreas municipales que ha gestionado desde 2011.
Por su parte, el portavoz de Compromís, Màrius Ivorra, que anunció los cambios antes incluso que el propio alcalde al lanzar un comunicado a primera hora de la mañana, aseguró que esta remodelación es «un intento de maquillar problemas graves que viene arrastrando este equipo de gobierno» y que los socialistas «han demostrado en repetidas ocasiones que están agotados y sin proyecto para la ciudad». En su opinión, se trata de un «juego de trileros» que se limita a «acomodar un poco más a los suyos en la silla». Una «manita de pintura», añadió, a un gobierno «que está más interesado por la forma de por el fondo, vendedor de humo y especializado en el pan y circo», dejando sin solucionar los problemas de la ciudad.
