El grupo escultórico de Nuestra Señora de las Angustias saldrá de nuevo a las calles esta noche formando parte de la procesión del Silencio después de que el pasado año se quebrara el varal del lateral trasero izquierdo cuando los costaleros intentaban alzar el trono dentro de la Concatedral de San Nicolás, su templo de partida, lo que les impidió al final sacar el paso en procesión. La hermandad se ha gastado 4.000 euros en los nuevos varales, ya que ha cambiado los cuatro, que fueron encargados a un ebanista de Alicante. "Son más consistentes y gruesos, para que resistan bien, aunque ahora el trono pesará más", explicó ayer el hermano mayor, Emilio Ramón.

Las viejas piezas fueron creadas en madera de pino hace poco más de una década, por lo que no eran muy antiguas ni estaban aparentemente estropeadas pero una de ellas se partió, "por verdadera mala sombra", aunque la hermandad se congratuló de que la talla, tan valiosa, no sufriera ningún daño. Los penitentes y miles de alicantinos que esperaban verla desfilar por su itinerario y la Carrera Oficial se quedaron sin poder hacerlo. La escena de Nuestra Señora de las Angustias es una de las joyas de la imaginería alicantina, la única de Salzillo que queda en la Semana Santa de la ciudad, y data del XVIII.

El trono de la virgen es portado por 32 cargadores más el capataz y desfila siguiendo al Cristo de la Buena Muerte. Esta imagen es muy venerada, data del año 1600 y se atribuye al escultor Nicolás de Bussi. La trasladan también 32 cargadores con la cara cubierta con verdugos de color negro. Todos son hombres en un derecho que se hereda de padres a hijos.

Más de 500 penitentes en las calles

Más de 500 penitentes participan en la procesión del Silencio, en la que las imágenes son acompañadas por miles de alicantinos realizando promesas, muchos de ellos descalzados. Únicamente el sonido de los trombones de varas y timbales de la banda de música de Mutxamel acompaña a este desfile, que parte esta noche de la Concatedral de San Nicolás a las 23.30 horas y que tiene previsto solicitar la venia para entrar en la Carrera Oficial, en la Rambla, a las 00.50, aunque también es interesante de ver su paso por el Casco Antiguo. El hecho de que sea una procesión en silencio impide que salgan niños, ya que la hermandad sólo lo permite a partir de que cumplan los 14 años.