«Esto es una locura, pero es genial. No me imaginaba que fuera así aunque había visto fotos. No sabía que había tantas hogueras por todos sitios y que toda la ciudad era una fiesta». Estas fueron las primeras impresiones de Corinna Zieschank, una estudiante alemana integrada dentro del Foro de Estudiantes Europeos (AEGEE) que ha organizado un viaje a Alicante desde el pasado día 22 hasta hoy para 40 universitarios de distintos países y de otras provincias españolas.

La organizadora del evento, Verónica Pérez, pensó que era buena idea dar a conocer las Hogueras y junto a otros compañeros alicantinos de este foro lanzó la propuesta «Alicante on fire». Al final, «como en el resto de sitios están de exámenes se han apuntado cuatro extranjeros y el resto españoles», explica.

En la plaza del Ayuntamiento vieron la Hoguera Oficial tras realizar divididos en grupos de diez varias «gymkanas» por distritos figueriles de la ciudad. Bailes con las bandas de música que van recorriendo las calles y fotos con las bellezas eran algunas de las pruebas. Pese al calor, que soportaban con botellas y pistolas de agua, extranjeros y españoles coincidían en mostrar su sorpresa por la cantidad de monumentos que se encontraban por todos los rincones y en asegurar que recomendarán sin dudarlo a sus amigos que vengan a Alicante en Hogueras.

A otra estudiante alemana, Sofia Waigend lo que más le ha gustado han sido los trajes de alicantina. «Bueno y las hogueras, no podría escoger una, me parecen todas preciosas y únicas, qué pena que las quemen», dice. «Yo me apunté para conocer otra cultura y probar la comida española pero me ha encantado que todo el mundo sea tan acogedor y el ambiente que se respira en la calle»», añade. La comida es también lo que terminó de convencer, junto a la playa, a varios estudiantes de Zaragoza, Salamanca, Oviedo, Madrid, Barcelona y Tarragona. «Yo creía que había diez o doce hogueras pero no 200, es una pasada. Y me encanta el ambientillo de las charangas por la calle porque en Zaragoza las han prohibido», comenta Rubén Sanz.

Como Verónica pertenece a la Hoguera de Santo Domingo, el grupo ha podido disfrutar de la barraca e incluso organizaron una cena con un plato típico de cada país en el que no faltaron ni la coca amb tonyina ni las brevas. «La verdad es que les está encantando a todos la Fiesta», asegura. A falta de vivir anoche la cremà y la banyà, la mascletà fue el momento que más impresionó a los foráneos pese a que les habían tratado de explicar en qué consistía. «Nunca había visto nada así, me ha parecido muy especial pero muy ruidoso», indicó Corinna. «¿Ah la parte final se llama terremoto? no me extraña, es impresionante», comentó la tarraconense Marta Masó. Incluso a dos valencianos del grupo les pareció «una pasada». Frente a la polémica levantada por su alcalde Joan Ribó, tras el comentario de que las fallas son «grotescas» y las hogueras «más artísticas», Ferrán Andreu señaló que «aunque sean fiestas hermanas cada sitio tiene su forma de vivirlas. Es la primera vez que vengo en Hogueras y me está encantando todo, sobre todo el ambiente».

Las Hogueras han atraído esta semana a miles de turistas. Muchos vienen con el esquema de qué hacer aprendido al milímetro, pero otros muchos desconocen los aspectos más básicos de esta fiesta. En la oficina de información turística de La Rambla están acostumbrados a responder a todo tipo de dudas. «Es muy común es que nos pregunten si los monumentos se guardan y después se sacan cada año», señala Luis Ángel Ruiz, empleado de esta oficina. Y es que lo que más sorprende a quien llega de fuera es lo efímero de las hogueras «Se sorprenden mucho de que al final se quemen». Resuelta esta duda, a muchos les asaltan otras cuestiones sobre la noche de la cremà. «Te preguntan cómo los bomberos pueden dar abasto esa noche o si no nos ahogamos viéndolas quemar, porque hay quien cree que están hechas de plástico», afirma Patricia Martínez, adjunta a la coordinación de la red Tourist Info.