En alerta frente a las nuevas cepas de coronavirus. Los hospitales de la provincia han comenzado a implantar sistemas para poder detectar en pocas horas y a través de las PCR que habitualmente se hacen en los centros de salud nuevas variantes del virus, en especial la británica, la africana y la brasileña.
El servicio de Microbiología del Hospital de Sant Joan ha sido uno de los primeros en incorporar esta tecnología para poder detectar de una manera rápida a qué cepa pertenece la muestra de un paciente contagiado de coronavirus. «Detectándola con una PCR específica podemos ganar tiempo, ya que los resultados están en un par de horas, y así actuar más rápido con las medidas preventivas», explica Victoria Ortiz de la Tabla, jefa de Microbiología del Hospital de Sant Joan. Y es que en el caso de las variantes brasileña y africana es aconsejable, añade De la Tabla, «que los contactos estrechos hagan cuarentenas más largas, de 14 días, ya que estas cepas son mucho más transmisibles y el virus tarda en eliminarse más tiempo». La búsqueda de variantes en las PCR se suma también a la secuenciación genética de muestras que están haciendo los hospitales generales de Alicante y Elche.
Para identificar estas cepas, el Hospital de Sant Joan utiliza la misma maquinaria en la que se procesan todas las PCR para detectar casos de coronavirus. La diferencia ahora, añade la responsable de Microbiología del departamento, «es que hemos adquirido los reactivos necesarios para procesarlas buscando las mutaciones específicas que tienen estas nuevas cepas». En el caso de la cepa británica el sistema la detecta de manera directa. También si hay se está ante un caso de variante brasileña o africana, «aunque para concretar cuál de los dos es hay que mandar a secuenciar genéticamente la muestra, pero lo importante es que ya podemos iniciar las medidas de aislamiento más fuertes».
El nuevo sistema también advierte si la muestra que se procesa pertenece a una cepa nueva no estudiada hasta el momento, por lo que sirve de control ante la posible llegada de nuevas variantes no detectadas en nuestro territorio hasta el momento.
Actualmente la cepa británica del coronavirus ya ha colonizado casi toda la Comunidad Valenciana y ha desplazado a la cepa salvaje.
El mayor peligro de esta variante es que es más contagiosa que la anterior, lo que ha causado problemas de saturación hospitalaria en muchas de las zonas en las que se ha extendido por Europa. Sin embargo, esta cepa no afecta a las vacunas que se están desarrollando frente al coronavirus.
En la provincia de Alicante también se han detectado casos de personas contagiadas con la cepa africana y con la brasileña, aunque han sido contagios esporádicos vinculados con viajes y los casos no han ido a más, según destacan fuentes sanitarias consultadas. Estas dos cepas son las que más preocupan en estos momentos a la comunidad científica, ya que en el caso de la sudafricana, además de ser más transmisible probablemente es resistente a la inmunidad que proporcionan las vacunas o la propia enfermedad, por lo que habría riesgo de reinfecciones por covid. En cuanto a la brasileña, además de ser más transmisible y escapar a la inmunidad, probablemente es más virulenta, según los estudios que se han hecho hasta el momento.
Red nacional
Con el objetivo de detectar a tiempo estas variantes del coronavirus, el Ministerio de Sanidad ha creado una red de laboratorios a nivel nacional que analizan genéticamente un porcentaje de todas las muestras que se extraen de pacientes con sospecha de padecer covid.
En la provincia de Alicante pertenecen a esta red los hospitales generales de Alicante y Elche. A ellos llegan quincenalmente muestras de todos los departamentos sanitarios para su análisis genético, una tarea compleja y que suele demorarse varios días. Sin embargo, la búsqueda de estas nuevas variantes a través de las PCR permite a los hospitales tener una alerta más rápida, independientemente de que luego las muestras se manden a secuenciar para su confirmación definitiva por parte de estos laboratorios de referencia.
