La gratuidad de los trenes de cercanías durante cuatro meses para los viajeros habituales, es decir, aquellos que utilizan algún tipo de abono, permitirá ahorrar 270,60 euros a quienes se desplazan a diario entre Alicante y Elche. Esta cantidad es lo que cuestan cuatro billetes multiviajes mensuales que dan la posibilidad de realizar dos trayectos cada jornada, uno de día y otro de vuelta, entre las dos principales ciudades de la provincia. Cada uno de ellos supone 67,65 euros, que entre septiembre y diciembre de este año no tendrán que pagarse, tal y como señala una de las principales medidas anticrisis que prevé poner en marcha el Gobierno.
El jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, anunció la gratuidad de los abonos de los trenes de cercanías y media distancia durante cuatro meses en el Debate sobre el Estado de la Nación, hace unos días, junto con otras iniciativas. Esta medida tendrá un especial impacto en zonas con una elevada movilidad; en la provincia de Alicante es probable que su impacto sea más limitado por las condiciones del servicio ferroviario, pero igualmente significativo en algunos trayectos. Entre ellos, no solamente Alicante-Elche, sino también cualquier otro que se realice dentro de las líneas de cercanías hacia Murcia y San Vicente del Raspeig, o bien en los trenes de media distancia de Alicante a València y Ciudad Real o de València a Alcoy.
La limitación temporal del descuento también hará que el impacto sea relativo, pero con todo podrán beneficiarse de él un gran número de personas, sobre todo las que se mueven habitualmente en la línea de cercanías Alicante-Murcia, la más usada de las que discurren por la provincia. En la Vega Baja, por ejemplo, quienes se desplacen a diario entre Orihuela y Elche podrán dejar de pagar la misma cantidad que quienes lo hagan de Elche a Alicante, al tratarse de un trayecto con las mismas zonas tarifarias; en cambio, entre Orihuela y Alicante el ahorro asciende a un total de 376,80 euros a lo largo de esos cuatro meses.
El abono mensual con un viaje diario de ida y vuelta es más susceptible de utilizarse en trayectos de una cierta distancia, pero también hay otra modalidad sin límite de recorridos en una misma jornada. Uno de tres zonas, válido para viajes como Elche-Alicante y Elche-Orihuela, cuesta 75,75 euros al mes, por lo que la bonificación total se sitúa en 303 euros. No obstante, este abono es más práctico para rutas más cortas, como por ejemplo entre Orihuela y Callosa de Segura; en este caso, el ahorro de cuatro meses se sitúa en 194 euros.
También se podrán beneficiar de estos descuentos los estudiantes, que constituyen un grueso importante de los usuarios de la línea de cercanías que comunica Alicante, Elche, Orihuela y Murcia, tanto para desplazarse a la Universidad de Alicante (UA) como a la Universidad Miguel Hernández (UMH). En este caso, no obstante, los abonos son trimestrales, y solo tienen validez a partir de octubre, por lo que el alcance de la rebaja será algo menor. Aun así, un estudiante que se desplace entre Alicante y Elche se ahorrará 185,05 euros.
En media distancia, trayectos no muy largos y susceptibles de hacerse a diario también podrán verse beneficiados de descuentos en los abonos multiviaje, como Alicante-Villena y desde el sur de la provincia de Valencia hasta Alcoy. En cualquier caso, habrá que esperar a que desde el Gobierno se ofrezcan datos más concretos en cuanto a la vigencia y alcance de la gratuidad de los abonos de cercanías y regionales. Hay que tener en cuenta, además, que los maquinistas alertan de que esto puede dar pie a un colapso del servicio de trenes, dado precisamente lo limitado de la frecuencia en algunos recorridos y momentos del día.
Tímida recuperación de usuarios en 2021
Por otra parte, el núcleo de cercanías de Alicante-Murcia registró el año pasado 2.209.100 viajeros entre sus tres líneas, aunque la que comunica las dos capitales es con diferencia la más utilizada, según las cuentas anuales de Renfe, publicadas recientemente. Esto supuso una recuperación del volumen de usuarios del 21,4% en relación a 2020, que estuvo marcado por una caída de pasajeros sin precedentes debido a la pandemia. Este repunte en la utilización del tren, no obstante, puede considerarse tímido, dado que las cifras de 2021 quedan todavía muy lejos de las de 2019; ese año se contabilizaron 3.461.800 viajeros.
Esta situación, cabe decir, resulta del todo comprensible por los cambios en los hábitos de movilidad que ha acarreado la pandemia, tanto por la ralentización de la actividad en general como por las posibles reticencias a utilizar transporte público por miedo a contagiarse de coronavirus. Además, hay que tener en cuenta las restricciones aún vigentes durante los primeros meses de 2021, que impedían, por ejemplo, ir de Orihuela a Murcia sin un motivo justificado.
Y esta circunstancia no ha sido, ni mucho menos, exclusiva del núcleo de cercanías de Alicante a Murcia, sino que todos ellos remontaron en 2021 los mínimos históricos de pasajeros del año anterior pero siguieron estando lejos de los datos alcanzados en 2019. Como ejemplo, el núcleo de València registró el ejercicio pasado 10.706.100 viajeros, cuando el año anterior a la pandemia había alcanzado los 16.184.100.
