La tramitación de la Santa Faz como BIC, en un cajón del Ayuntamiento de Alicante

La Conselleria de Cultura espera desde hace seis años un estudio requerido al gobierno local para poder elevar la protección al conjunto patrimonial del Monasterio

Varias personas tratan de tocar la imagen de la Santa Faz en la romería de 2022.

Varias personas tratan de tocar la imagen de la Santa Faz en la romería de 2022. / David Revenga

Alberto Losa

Alberto Losa

La Santa Faz sigue en proceso de ser declarada Bien de Interés Cultura (BIC). Un proceso que lleva cerca de seis años, desde 2017, anclado y estancado por la falta de avances desde el Ayuntamiento de Alicante. La Conselleria de Cultura ha indicado que el Ayuntamiento "no ha presentado ningún documento a la Dirección General de Cultura y Patrimonio" y que "todo sigue en la misma situación que hace año y medio".

En esa fecha, un informe municipal indicaba que la declaración de Santa Faz como BIC "requiere un estudio de carácter multidisciplinar, exhaustivo y pormenorizado del inmueble, en el que se valoren aspectos de su estado, conservación, interés cultural y características arquitectónicas que permitan considerar la excepcionalidad del bien", pero que dicho estudio se encontraba parado porque "no hay personal suficiente para realizarlo" en Cultura y Urbanismo.

Estancado

El estancamiento no es nuevo. De hecho, la Conselleria de Cultura no sabe nada nuevo del asunto desde 2017, cuando requirió al Ayuntamiento de Alicante documentación complementaria para la instrucción del expediente. Desde las concejalías apuntan que se responderá a esta cuestión en el Pleno, en una situación que el portavoz de Compromís en Alicante, Natxo Bellido, considera de "desidia" hacia "la protección del patrimonio". El primer intento de que el Monasterio de Santa Faz se declare BIC se remonta a 2002, hace ya más de veinte años, cuando se comenzó a impulsar la tramitación por incentiva del entonces cronista oficial, Enrique Cutillas, aunque el intento no fue fructífero.

En el Pleno municipal de este jueves, el portavoz de Compromís, Natxo Bellido, registrará una pregunta a ambas concejalías porque consideran que "un año más llegamos a Santa Faz sin los deberes hechos".

En 2017, el proceso se relanzó a través de una iniciativa plenaria. La propuesta llegó a la Conselleria, que requirió documentación y se aconsejó ampliar la petición de BIC a la romería. Según el informe municipal, en 2018, desde la Concejalía de Cultura se remontó otra vez el expediente. Y hasta ahora, cuando Bellido volverá a preguntar en el Pleno porque "más allá de creencias en aquellas manifestaciones cívicas y arquitectónicas que nos recuerdan nuestro pasado, nos ayudan a entender el presente de nuestras tradiciones y nos proyectan colectivamente de cara al futuro".

El Monasterio de la Santa Faz, este miércoles.

El Monasterio de la Santa Faz, este miércoles. / HÉCTOR FUENTES

La torre ya es BIC

Del conjunto de la Santa Faz solo es Bien de Interés Cultural la torre defensiva. El entorno de protección de la torre es un círculo de 200 metros alrededor de la misma, que se definió en 1997 junto a otras 23 torres y elementos defensivos del término municipal de Alicante. Esta protección incluye por tanto al monasterio pero en 2017 se apostó en Pleno por elevar el conjunto del monasterio a BIC. Con motivo de la exposición La Luz de las Imágenes, se restauraron los cinco lienzos del camarín donde se custodia la Faz Divina, y más recientemente, se han realizado obras para transformar la segunda planta del monasterio, en una zona fuera de la clausura, en una hospedería, entre otras intervenciones.

En cuanto a la declaración de la Peregrina como Bien de Interés Cultural Inmaterial, el procedimiento está paralizado. Solicitada por acuerdo de pleno en abril de 2016, cuando gobernaba el tripartito, la Conselleria de Cultura pidió al Ayuntamiento de Alicante en enero de 2017 una ficha de catalogación con todos los datos de identificación a comunidades y personas relacionadas con la Peregrina, y una descripción de los orígenes documentados, evolución histórica y modificaciones; indumentarias, prácticas y funciones; actividades y oficios; desarrollo y secuencia temporal; datos de dedicación y financiación; la relación de los bienes muebles e inmuebles y entornos de interés vinculados; interpretación y simbolismos; percepción y el grado de implicación de la población.